El León Blanco

Por
Enviado el , clasificado en Reflexiones
1081 visitas

Marcar como relato favorito

Había una vez………

Un Viejo león  que era el rey de una lejana comarca perteneciente a la selva de  Borneo

En el reino había muchos conflictos entre los habitantes y como si esto fuera poco, el rey  sospechaba que sus posesiones  estaban siendo robadas  sin poder descubrir hasta el momento quienes eran los ladrones.

 El viejo león  se sentía  muy cansado para resolver tantos problemas al mismo tiempo y si bien  deseaba recibir ayuda no sabia a quien acudir, ya que todos  suponen que los reyes están capacitados para gobernar sin ayuda 

El monarca tenía una hija, pero esta no se interesaba para nada por los conflictos que se producían en el reino y tampoco ayudaba a su padre a mantener el orden, solo le gustaba descansar al sol y que el monarca satisficiera todos sus caprichos.

Sintiéndose muy preocupado  el rey decidió acudir a uno de sus consejeros más  cercanos,  un león tan anciano como el pero  en cual el monarca confiaba plenamente.

El consejero pensó mucho sobre los problemas que le planteaba su rey y  al fin le respondió.

Mi Rey,  lo que Ud. necesita es modificar las leyes que rigen este reino, y reemplazarlas por otras más adecuadas a los tiempos que estamos viviendo. Para hacer ese trabajo yo le aconsejo llamar a un joven león blanco muy conocido por su honestidad y buen criterio y pedirle que se haga cargo de todas estas reformas.

El rey león acepto las recomendaciones de su consejero y mando buscar al joven león blanco.

Este concurrió de buen grado, ya que consideraba un honor que el rey lo hubiese elegido entre sus súbditos para colaborar en las tareas organizativas del reino.

Así fue como el joven león blanco comenzó a trabajar junto al rey para resolver los conflictos que este le había planteado.

Pasaron varios meses y el rey  comenzó a notar las mejoras que se habían  producido en su reino, en principio no hubo más robos, en sus posesiones  y en cuanto a  los problemas entre sus súbditos, estos disminuyeron notablemente gracias a que el joven león blanco aconsejo enviar al destierro a varios habitantes sospechados de haber intervenido en los robos.

Todo iba de maravillas hasta que el rey decidió  que  su hija debía  participar en los asuntos del reino y la conmino a realizar algunas tareas  dentro del palacio. Como la princesa nunca había hecho nada productivo y tampoco  tenía deseos de hacerlo  cumplía con  las órdenes de  su padre de muy mala gana. Esto generaba conflictos diarios entre las personas que la rodeaban ya que eran ellas las que debían subsanar  los errores de la princesa,  antes de que el Rey se diese cuenta y los acusara a ellos de no cumplir con  sus obligaciones

La princesa , acostumbrada a ser el centro de atracción del reino,  se sentía muy desconforme al tener que cumplir algunas tareas como el resto de los subditos, y para vengarse le hacia la vida imposible a todos los que estaban junto a ella.

 A raíz de estos hechos se   fueron agudizando nuevamente los conflictos  entre los habitantes del palacio  y muchos de ellos le pidieron al rey renunciar a sus tareas habituales.

El joven león blanco tuvo que intervenir nuevamente para calmar los ánimos pero la situación continuaba siendo de mucha tensión, entonces decidió hablar con el monarca y contarle  lo que estaba pasando con su hija. El monarca reconoció que la princesa no tenia condiciones para gobernar  y que eso se debía a que él  nunca le había podido poner los limites necesarios cuando que era pequeña, de todos modos le indico al joven león blanco que le tuviera paciencia y que tratara de apaciguar a los súbditos.

 Desde ese dia el joven león blanco se ocupo no solo de lo que tenía que hacer la princesa,  sino también de tomar decisiones trascendentales como si el mismo fuera el rey.

Durante varios años todo marcho perfectamente ya que el joven león blanco había conseguido poner orden en  el reino , todos lo consultaban  y confiaban en sus sabias decisiones, hasta que un dia el rey comenzó a tener problemas de salud y comprendió que le quedaba poco tiempo de vida, entonces llamo a sus consejeros y les informo la verdad. Estos  le dijeron que al no tener un hijo varón que lo heredara sería conveniente que el reino quedara en manos del joven león blanco que tanto había hecho para mantener  la paz   y que conocía profundamente las necesidades de sus súbditos.

En un primer momento  El rey estuvo de acuerdo,  pero a la noche cuando se encontraba a solas en su alcoba, comenzó a pensar que si bien la princesa no cumplía con ninguna de las condiciones indispensable  para ser una  reina, era su hija y por lo tanto debía  heredar el trono de cualquier manera.

Al dia siguiente el monarca volvió a reunir a sus consejeros y les ordeno reformar  la ley que  decía que solo un hijo varón podía heredar la corona del reino, y les dijo que a partir de la fecha las hijas mujeres también iban a poder  acceder al trono.

A los pocos dia el rey  murió y su hija fue coronada reina, mientras el joven león blanco que había hecho tanto para alcanzar el bienestar del reino, fue desterrado y nunca más se supo de él.

 Moraleja: Si no eres  el Rey,  no actúes como si lo fueras 


¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales

Denunciar relato

Comentarios

COMENTAR

(No se hará publico)
Seguridad:
Indica el resultado correcto

Por favor, se respetuoso con tus comentarios, no insultes ni agravies.

Buscador

ElevoPress - Servicio de mantenimiento WordPress Zapatos para bebés, niños y niñas con grandes descuentos

Síguenos en:

Facebook Twitter RSS feed