LA VIDA

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LA VIDA

La vida es aquello que te va sucediendo mientras te empeñas en hacer otros planes. JOHN LENNON.

 

Salí por el portal de los ángeles. Lo vi claramente, mi vida había comenzado…, ¿ de nuevo?; puede ser que ya hubiese estado otra vez aquí.

Mis lloros se mezclaban con una nube llena de vapores y voces que me daban la bienvenida a este mundo. Todo estaba por venir, delante tenia una vida que nunca sabes por donde te vendrá y la cual algún día inesperado se acabara.

Al principio todo es color de rosas. Tu cuerpecito comienza a crecer, para al final convertirse en el monstruo en que todos en mayor o menor medida nos convertimos….
Somos barro y la vida nos moldea de la manera mas perra o mas llevable posible.

Nuestros padres terrenales intentan educarnos dentro de sus posibilidades culturales y sociales. Mientras, ahí arriba tus verdaderos primogénitos intentan ayudarte, o al menos eso crees, hasta que un buen día se llevan algo de ti…; algo a lo que te aferrabas, en lo que confiabas, por lo que luchabas día a día.
Tu fe se va yendo de tu vida. Como esta se va despidiendo de tus seres queridos cada vez con más frecuencia según tu tiempo avanza en tu cuerpo terrenal….

La vida…, esa puta con la guadaña siempre esperándote en cualquier esquina en la que tropieces con su sombra oscura….
El tiempo pasa, creces: mi primer día de clase no me gusto nada, me escape en cuanto pude….
Quería refugiarme desde el principio en mi mismo. Mi pequeño” yo “ me decía que mi vida había comenzado ya en serio; la carrera hacia el final del túnel, del si o el no, del azar, de la amargura, la felicidad o la tristeza, el querer y no poder, la impotencia, la sobriedad, la embriaguez, los sueños, el trabajo, la muerte….
Me daba miedo que la vida corriese rápida e inexorable hacia el final de todo lo bueno que me quedaba por vivir.

Cuando eres niño quieres crecer y cuando creces querrías ser de nuevo niño, otra de las paradojas que la vida nos invita a pasar junto a ella….

Fui feliz. Cuando no me gustaba lo que un momento me ofrecía me internaba en mis sueños, en mi mundo interior, donde siempre he sido bien acogido.
Gracias a mi mundo pude nutrirme de la esencia del saber humano, y descarte lo que negativamente me enseñaban en el planeta del cual me había tocado vivir….
Los maestros de la escuela les decían a mis padres que siempre estaba presente, pero que había momentos en los que desconectaba y estaba en otro sitio….
Lo correcto y lo incorrecto…, siempre el mismo dilema en esta vida terrenal que te toca sufrir.
Mis síntomas de desconectar de este mundo me llevo a visitar al medico de las mentes enfermas. Siempre me he preguntado una cosa: ¿los locos están realmente locos?…, ¿no puede ser que estos vean la vida de otra manera a los que les rodean y los locos sean los demás?….

A estos médicos les llaman psicólogos. Otro de los nombres inventados por esta sociedad en la que vivimos presos de leyes, políticos, normas, consumismo y destrucción en general.
Mi diagnostico no pudo dictaminarse, pues a estos tipos nunca los tome en serio y tengo que decir que a mi corta edad ya supe torearles a mi manera: gracias a la ayuda que me presto de nuevo mi otro mundo, siempre presente durante mi vida….

Fue una etapa muy amena en la que aprendí a utilizar mi otro “yo” y lo agradecí bastante.
La vida continúa avanzando: los primeros amores, los nuevos amigos en los que confiar, y tu inocencia…, que pierdes poco a poco, para volverte un ser asqueroso y vil como la mayoría de los que te rodean.
Todo es una rueda que nuestro verdadero padre un día comenzó y de la que se olvido acomodándose en su cielo, dejando que el bien y el mal siempre estuviesen en contacto con sus hijos….

-¡Padre por que me has abandonado!-. Este grito de dolor del señor Jesucristo es el comienzo del final de nuestros días y la maldición del ser humano tal y como la conocemos hasta hoy….
¿Y cuando es hoy ?…. Mañana, pasado, dentro de un año, dos….
El tiempo, siempre juzgándonos con su paso raudo hacia nuestro final.


Crecí jugando junto a mis amigos y seres queridos en los campos de fresas de mis ahora sueños de infancia. Ha pasado toda una vida y parece que hace un rato volvía a casa después de una tarde en la ribera del río….

Cuando eres niño la vida te da grandes amigos con los que experimentas la mayor de las atracciones mundanas. Continuamente estas en las alturas y crees que nunca podrás bajar de ese lugar, el mundo es tuyo, el tiempo es tuyo y todo lo que te rodea es maravillosamente natural y agradecido.

La ayuda de la amistad…, realidad cuando eres niño…, mentira cuando pierdes esa posesión temporal….
Con el paso del tiempo la vida te pone pruebas muy duras que difícilmente logras superar. Si no las pasas te bajas en la siguiente estación…; si las pasas continúas hasta el final del próximo paso elevado….

La vida…, el tiempo…, el pasado….
Un buen día intentas recuperar lo que antaño perdiste y cuando lo recuperas te das cuenta que ya nada es como lo dejaste en aquel campo de fresas en el que solías jugar.
Todo ha cambiado. No somos los mismos…. Sin darnos cuenta nos hemos transformado e intentamos ocultar lo que realmente somos…, que no es otra cosa que las sombras de lo que fuimos antaño.
El tiempo nos engaño como así seguirá haciéndolo durante toda una vida. Una vida corta, pues el tiempo es raudo como una estrella fugaz que cae desde una dimensión desconocida para nosotros….

La vida se llevo a mi primer “Gurú” terrenal. El me enseño a soñar con un mundo sin guerras, un mundo de amor y la amistad pura de mi niñez….
Mi segundo “Gurú” fue como un hermano para mi. Un hueco de mi vida tenia sentido junto a el….

Es la vida. Esa puta que intenta joderte cuando menos te lo esperas. He perdido la fe…. Soy una hormiguita más de este experimento que desde arriba manejan nuestros padres celestiales.
Algún día espero volver a revivir de nuevo lo que perdí hace ya… ¿días?….

La vida pasara y tu y yo también. Es así la vida, es así la vida. No la podemos cambiar.
Y todo quedara, y tu y yo atrás…. Es así la vida, es así la vida. No la podemos cambiar….

 

 

 


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