El bebe caguengue

Por
Enviado el , clasificado en Ciencia ficción
2255 visitas

Marcar como relato favorito

Despierto tirado en el pavimento. Me levanto con intriga de lo sucedido, pero no recuerdo nada. Veo a mi alrededor, el panorama es fatal: Las calles están solas, algunos autos volcados & otros más están vacíos.

Todo es gris, triste y trágico me siento terrible. Muerto en vida ya quisiera la muerte ser mi amiga.

Me siento triste, ni la muerte me quiere a su lado.

Y bajo el sol estival mis pestañas danzan al ritmo de los latidos del sucio mar.

Pero finalmente veo a través de tanto gris, tanto humo, tanta devastación...

Movimiento, atisbo mis sentidos y Alcanzo a escuchar... ¿Acaso será posible? Un

llanto, el llanto de un bebé, que gatea, gatea y llora; cuando decido Es solo un sueño,

el cual creí despertar...pero aún continuaba en ella.

Pero de repente. Veo a lo lejos una gran algarabía. ¿Qué pasa?

Y entonces me pregunto ¿Tan rápido llegamos a esto? ¿Acaso fue que llegó la tercera

Guerra que tanto temíamos?

De la nada aparece Chuck Norris y mato a todo el mundo con sus patadas voladoras,

tomaron chelas y despertaron meados con resultados sexuales, pero yo no morí.

Me costó trabajo entender que seguía solo y que muy pronto el sol se ocultaría tal vez

para siempre pero sin certeza alguna, me incorporé a buscar refugio pues la brisa

estaba helando.       

Entonces revivieron con las esferas del dragón y todos se disponían a tener una orgia.

 

Frío viento que cubría el terreno, el movimiento se detuvo, nada hubo luego, todos

seguían viendo en la televisión a sus héroes ficticios como Chuck Norris o Goku con las

esferas del dragón, pero lo cierto es, que la vida se había detenido. Gris, monótono.

Después un mundo se perdían en el atardecer, las estrellas brillaron más relucientes

que nunca y termine metido en los espejismos del mundo surrealista.

 

De la nada un bebé se posaba en la calle. Quería cagar. ¿Cómo lo supe? Su expresión

en la cara lo dejaba al descubierto. Pero ese bebé no era un bebé inofensivo, era un

bebé maldito.

Despues pensé No, no puede ser posible porque ese bebé con las explosiones sufrió de

una mutación que alteró su sistema digestivo y ya no tenía necesidad de defecar, el

sólo quería un poco de amor (y bibi, los bebés siempre quieren biberón)

Pero sin darme cuenta con el deseo que concedieron las esferas del dragón él bebe

ahora defeca 35mil veces al día

Esto es un problema, me dije, 35 mil cagadas al día supone 70.000 gramos de mierda

diaria, 2.100 kilos mensuales, 23,2 toneladas anuales..., a ese ritmo la tierra estará

cubierta de mierda en... un ¡¡siglo!! Nada que hacer, el bebé debe morir.

Me dirijo a la armería de la plaza principal de la ciudad donde vivo y entre. Está sola,

veo una escopeta y la tomo. Salgo y voy a donde está él bebe cagón.

¡Qué gran dilema!, me dije, quizá alimentándolo con compotas y batidos pueda

sobrevivir sin inundarnos de caca.

De pronto un fuerte dolor de cabeza me azota, caigo de rodillas agarrándome la

cabeza y con mis ojos cerrados veo una infinidad de imágenes y me doy cuenta que

todo lo que he visto es irreal… a excepción del bebé.

 

Sin embargo parece todo tan real, el aturdimiento está en mi cabeza, el dolor interno

persiste, el sentimiento de desolación y nula esperanza se encuentran en mi ser, de

repente empieza a deshacerse en mí el abotagamiento al ir recordando el

origen de todo, cuando finalmente entra mi esposa en la habitación y me confirma lo

que tanto temía y ahora es una certeza: mi suegra se viene a vivir con nosotros; el

bebé defeca una vez más y llora, yo hago lo mismo.


¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales

Denunciar relato

Comentarios

COMENTAR

(No se hará publico)
Seguridad:
Indica el resultado correcto

Por favor, se respetuoso con tus comentarios, no insultes ni agravies.

Buscador

ElevoPress - Servicio de mantenimiento WordPress Zapatos para bebés, niños y niñas con grandes descuentos

Síguenos en:

Facebook Twitter RSS feed