EL ADULTERIO DE LOS DIOSES

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Afrodita era la diosa del amor de la antigua Grecia.
Por orden de Zeus, se había casado con Hefesto, el herrero, a quien nunca le fue fiel.
Por ser cojo, Hefesto era considerado el dios imperfecto.
Aunque conocía los deveneos amorosos de su esposa, pero convencido que, como diosa del amor y del deseo, su función consistía en hacer y propagar el amor, los consideraba su quehacer divino.
Claro que..."No hagas lo que no quieres que se sepa", decía mi abuela. ¡Que verdad !
Presos de los arrebatos de una pasión desenfrenada, Afrodita y Ares, protagonizaban el episodio de adulterio mas bochornoso de todo el Olimpo.
Hefesto se enteró por las "malas lenguas", que su desleal y engañosa esposa, se reunia con el dios de la guerra, en su propio palacio y allí perpetraba su infidelidad amorosa.

También supo que Ares, no solo era otro de los amantes de su mujer, sino el preferido, hasta el punto de haber concebido hijos de el.

Entonces, dolorido y humillado por el adulterio de su amada, el herrero, haciendo gala de toda su maestría en el oficio, forjó una red de metal, muy fina y casi imperceptible, que ató a los postes de la cama.
Cuando los dos enamorados volvieron a encontrarse, quedaron atrapados por esa red invisible, de la que no podian escapar.
Hefesto, ansioso por vengarse de tal cruel humillación, convocó a todos los dioses del Olimpo, a fin de poner en evidencia el pecaminoso proceder de los adúlteros.
Pero los dioses respondieron con carcajadas y bromas, burlandose del dios imperfecto 


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