AÑO NUEVO MALDITO

¡¡¡Andressss!!!, fué el grito que me despertó, y con desgano, soñoliento y algo de enojo respondí, ¿Qué pasa?. "¡Vamos, los chalacos están preparando un tonazo de año nuevo, alista tus cosas y vámonos¡". Era mi cuñado y me extrañaba tanto esa invitación, sabía perfectamente que no soy de fiestas, y menos si sucedería a 500 kilómetros de mi casa, por lo que deduje que debía estar ebrio, y pucha, estaba a punto de negarme rotundamente hasta que se me vino a la mente Lima, un distrito al sur de Lima, donde vivía ella, la sensación de saberme mas cerca de ahí me animó. Y así partimos en la camioneta de mi cuñado hacia el Callao, a la casa de unos primos, y junto a otros parientes viajamos con mucho entusiasmo.
Apenas llegamos a Lima, la llamé a su amiga, con el pretexto de darle el "Feliz Año", y me dijo: "Andrés. disculpa que no te haya respondido tu email, es que anduve muy ocupada estos días, pero apenas pueda te respondo". Le había escrito contándole nuestra "ruptura" hace un mes y donde le pedí algún favor que me imaginé iba a ser difícil para ella.
Al fin llegamos a nuestro destino y no cabe duda que los chalacos sabían festejar, harto trago, chelas, vinos, uvas, mucha comida y hasta quemas de castillos me hicieron olvidar en varios momentos Lima, el sur de Lima.
Pero igual, la poca costumbre hizo que me "guardara" temprano, escapándome astutamente de mis primos, jeje.
A la mañana siguiente, muy temprano, partí a Lima, debía regresar para el cebiche del mediodía, pero no estaba del todo animado a pesar de lo bonito que estuvo todo, pensaba como un cojudo en ella, con la estúpida esperanza de que su amiga le haya contado que estoy en Lima, que me llamase y me dijera que nos veamos para festejar el año nuevo, o aunquesea me llame para darme el "feliz año", aunque sabía que no sucedería, pues ni en la Navidad me llamó, menos lo haría ese día, pero en fín, me conformé con el saludo por el hotmail que me envió, y que ojalá no lo hubiera hecho.
La noche anterior había llamado a Jorge, un amigo de Lima, que vive por el cono norte, me respondió animado y hasta me invitó a que la pasáramos en su casa con su familia, pero le prometí visitarlo al día siguiente, para salir a cortar la "mala" noche. Ya en Lima lo volví a llamar y esta vez con algo de preocupación me respondió: "Cholito, ahora estoy algo ocupado, es que no sabemos donde está mi hermano y estamos buscándolo por todo el barrio, salió muy ebrio luego del recibimiento del año nuevo, y no sabemos a dónde ni con quienes. Le respondí: "ok cholito, te entiendo, pero bueno, seguro la está siguiendo por ahí en algún hueco, no te preocupes, pero sí, síguelo buscando, porque no vaya a ser que le pase algo malo".
Sentí que la mala racha no me iba a dejar este año tampoco, así que llamé a otro contacto mío, y otro, y otro que nunca pensé en llamar, y nada, tal parecía que todos ya estaban con tremenda resaca y peor aún ni se levantaban de la cama. Por último llamé a un amigo que no veía mas de 1 año, me respondió y encendió mis esperanzas , pero se oyó una bulla y música ensordecedora, y su voz similar a Melcochita cuando la hacía de borracho, jeje, me dijo: "Vente, estoy en una fiesta, por la av Uruguay". Yo andaba cerca de ahí, pero le respondí: "No, me estoy yendo a la playa con unos amigos, pensé que querrías acompañarnos". Entonces me respondió: "No pasa nada, acá está linda la cosa, ¡ Feliz año nuevo !".
Bueno, a todo esto, ya en el cuarto donde me hospedé, saqué mi botella de vino que había comprado el día anterior y que traía de regalo una copa bien bonita, brindé solo el nuevo año y me puse a ver una película de Indiana Jones que transmitía un canal de cable.
Denuevo me acordé de Jorge en la tarde y lo volví a llamar, y esta vez me respondió mas que preocupado, algo triste: "Cholito, que fué, ¿dieron con tu hermano?. Me respondió: "No cholo, esta vez estamos recurriendo a la policía, pero deben pasar 24 horas para que lo consideren como desaparecido y empiecen a actuar, y porsiacaso, mi otro hermano sugirió que buscáramos también en los hospitales y hasta en la morgue, queremos descartarlo todo"; a lo que para animarlo le dije: "Seguro andará con alguna mujer por ahí, no exageren, no te preocupes, ya aparecerá", y así le deseé suerte y le dí el "feliz año".
Así fué que me quedé esa noche en Lima, para partir el 2 de enero, maliciando el alto costo de los pasajes y toda la multitud ansiosa por viajar la noche del primero de enero.
Al día siguiente, ya en el bus partiendo de Lima, y algo tristón por no haberla visto aunquesea por año nuevo, volví a llamar a Jorge, confiado en que había hallado a su hermano y reirnos del mal momento que les habría hecho pasar: ¿Jorgito?, ¿como estás, me pasas con tu hermano por favor?, jeje; y con voz resquebrajada y a punto de estallar en llanto me respondió: "Murió, Andrés, se murió mi hermano, lo hallamos en la morgue, ahora estoy ocupadito viendo lo del sepelio, ¿me disculpas si?. En ese momento me vino una pena tremenda por mi amigo, que aunque lo conocía poco, se notaba que era un gran tipo, siempre respetuoso, como pocos, y tratándome de "Señor ingeniero",jeje, me daba gracia cuando me decía así, a lo cual le correspondía diciéndole: "ok, señor Jorge". Fué uno de esos momentos que nunca olvidaré, de esos momentos que te hacen reflexionar y valorar mas la vida. Ya camino a Chimbote, no dejé de pensar en Jorge, de lo mal que se debía estar sintiendo, y que comparado a mi tristeza, él sí que tenía razones, en cambio yo como un tonto queriendo a alguien que me demostró con creces no quererme, en fin cosas de la vida...