EL VERDUGO SR. TREN

 El  verdugo Sr. Tren

En la era medieval escogían a un verdugo para segar la vida de el que por un motivo u otro, en muchos casos injustificados, alguien decidía que así debía ser, los tiempos han ido cambiando afortunadamente y aunque para sorpresa del mundo civilizado aún hay alguien que corta cabezas sin razón, o al menos no la razón que lo justifique, no creo que nadie tiene que ser verdugo de nadie, al menos dejar las manos libres para defenderse, sino, es un asesinato a sangre fría, por cuestiones que jamás justifican dejar a unos niños sin padre a una mujer sin marido a unos hermanos sin su hermano y sobre todo a unos padres sin su hijo. ¿Quién los juzga? Pero no puedo seguir hablando de ello, hay hoy un motivo por el cual inicié este relato, un chico o chica hombre o mujer decidió ser su propio juez y dictar sentencia a su vida en las vías del tren, convirtiendo al Sr. Tren Verdugo de su vida y de rebote un conductor asustado e impactado que no podrá dormir tranquilo nunca más en su vida, él no decidió ejecutar, pero alguien decidió por él al azar. Hoy te ha tocado a ti, conductor solitario encerrado en tu cabina con la mirada clavada en las vías, con la conciencia tranquila pero herida, un accidente? Un suicidio? Nadie se define, y en las estaciones nadie entiende que pasa? Y por megafonía explican que un arrollamiento es la razón y miras el reloj, el móvil activas, no nos conocemos y la vida continua, para unos llegar tarde al trabajo, para otros a una cita y solo para dos una razón sin medida un verdugo por primera vez inocente, una víctima que no lo explica, una familia afligida grita al oír la noticia. Día con luz hoy amaneció para alguien jamás amaneció más gris, la vida de nubarrones se cubrió. Un sentido pésame al que hoy tiró su vida a las vías del tren.