Diario de Cesáreo Beltrán

Por
Enviado el , clasificado en Cuentos
1240 visitas

Marcar como relato favorito

En la cueva Ignateva descubrí el esqueleto de un vampiro. Se lo comuniqué al equipo. Afortunadamente, un periodista de Japan News Network se encontraba en la zona realizando un reportaje sobre avistamientos de ovnis. Aiko y yo decidimos investigar más a fondo en la cueva. No nos interesó lo más mínimo la figura de Venus, ni los restos de animales, ni las pinturas rupestres. Al carajo con ellas. Lo que nos heló la sangre fue ver que la mujer del vampiro todavía vivía. Se llamaba Svetlana. Nos habló de una historia de amor maravillosa. Aiko le dijo que era japonesa, y yo le dije que era de España. ¿España?, preguntó Svetlana. "Ah, sí, en ese sitio comí rabo de toro y chupé la sangre de unas cuantas ratas. No me gustó".

 

¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales

Denunciar relato

Comentarios

COMENTAR

(No se hará publico)
Seguridad:
Indica el resultado correcto

Por favor, se respetuoso con tus comentarios, no insultes ni agravies.

Buscador

ElevoPress - Servicio de mantenimiento WordPress Zapatos para bebés, niños y niñas con grandes descuentos

Síguenos en:

Facebook Twitter RSS feed