La loca de los gatos se casó.

Vivía sola rodeada de gatos siameses. Los ponía nombres variopintos: Darsy, Eduard, Tango, etc. Ella fué guapa en su juventud. Pero se consumió en esas cuatro paredes sola. Aguantando las criticas. Que atravesaban las paredes. Pero resulta que conoció a ún hombre guapo de ojos azules como los gatos siameses. La boda dió muxo de que hablar. La felicidad duró poco. Ella murió. Sé, de buena tinta que murió feliz. Pero sin saber que él fué poco a poco envenenandola. Ahora él se quedo con sú casa y sus gatos. Ahora lo llamamos en el pueblo.El gato triste.