Reconciliación

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Habíamos salido de fiesta para disfrutar el fin de semana y lo poco que podíamos estar todas juntas.
Estábamos mi mejor amiga, su novia, mi novia y yo.
Mi novia y yo a penas llevábamos dos meses siendo pareja.
La noche siempre empezaba bien y tranquila, pero a medida que iba pasando el tiempo por una cosa u otra mi novia siempre se enfadaba o la liaba.
Y así fue esta vez también. Decidimos ir a casa, a parte de que discutíamos ya era tarde. Fuimos a la parada de taxis y cogimos uno nosotras dos. No nos dirigimos la palabra en el trayecto.
Al bajar del taxi, que por cierto, llovía bastante, ella no quería entrar a mi casa. Yo intentaba tranquilizarla ya que estaba bastante nerviosa y gritaba.
Le dije que entrara a mi casa al menos para hablar, nos estábamos empapando. Y la gente dormía...
Ella era súper cabezona y no quería, se quería ir. Pero ella aquí no tenía a ningún lado donde ir. Y yo no la iba a dejar en la calle sola.
Al cabo de un rato accedió a entrar. Subimos a mi habitación y se sentó en el suelo.
Yo me empecé a reír porque me parecía todo súper irreal y a demás que se había enfadado ella sola.
En realidad me parecía muy graciosa ahí sentada y enfadada...
Yo me senté en la cama y me quité las pulseras, anillos, etc.
Ella me miraba y me hablaba mal, discutiendo y repitiendo que se quería ir. Empezó a mirar sitios donde poder quedarse a pasar la noche.
Le dije que no la podía dejar irse así, que no fuese tan cabezota y que se tumbase.
Me dijo que no quería dormir conmigo.
Yo me quedé en silencio y empecé a desabrocharme la camisa y los pantalones para dormir.
Al poco rato ella también se empezó a desvestir y se sentó en el borde de la cama. Yo estaba tumbada.
Empezamos a hablar más tranquilamente, poco a poco ya se reía y hacíamos tonterías.
Se ponía muy mona cuando se enfadaba aunque me hiciese enfadar a mi.
Le dije que no se enfadase tanto y mientras se acercaba y me besaba me decía que lo sentía.
Se tumbó en la cama y seguía besándome, bajaba por mi cuello lentamente. Yo la cogía por el culo y la ponía encima de mi.
Me encantaba hacerlo con ella, tenía una conexión especial, algo que no había sentido así con nadie más. Solamente con tocarle me volvía loca.
Sus piernas se entrelazaban con las mías, mis manos en su culo la llevaban y ella empezaba a gemir en mi oreja. Eso me encantaba, ver como se ponía y mientras susurraba mi nombre...
Le metí la mano por debajo de su tanga y le tocaba, estaba muy caliente.
Le quité la ropa interior y la puse desnuda encima mio, mientras volvía a tocarle, era perfecto sentirla así, su cuerpo desnudo encima del mio, notar como su respiración aumentaba y su temperatura.
La tumbé y bajé hasta su ombligo con mi lengua, continué más abajo, hasta que no pudo más.
Subí hasta su boca y le besaba muy despacito, le acariciaba su cuerpo, recorría sus tatuajes que me flipaban.
Se sentó encima mio, me besaba y me tocaba despacio, de cada vez iba más rápido y yo me moría de placer, recorría mis pechos con su lengua e iba bajando, siguió con su lengua hasta que estallé.
Se tumbó a mi lado mientras seguíamos besándonos despacito, dulcemente.
Lo más bonito era quedarme desnuda frente a ella, mientras me acariciaba y me miraba hasta que me dormía.

 


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