Dame.

Devuélveme la risa, que parecido dice la  canción.

Devuélveme las ganas de vivir, que no es una invención.

Que quiero seguirte, atado,

dame algo para seguir a tu lado.

Que tu humillación se apiáde.

Deja que la niebla levante,

que con la brisa de los años 

tu crueldad no aumente mí daño.

Mira el camino andado,

¿en él ves algo guardado?

Solo cumplir el compromiso,

pues sabido es, que nada iba ser exquisito.

Y, si nada vale mi lamento,

déjame pasear contento.

Y llorar, que me hace falta.

A ver donde metí la pata.