R&R

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Enviado el , clasificado en Adultos / eróticos
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Con una copa en la mano, la miro desde lejos. La verdad es que la hija de mi jefe esta muy bien. Nunca me había fijado tanto en una mujer, pero es dificil no mirar a Raquel, tiene el pecho voluptuoso y el culo respingón, por lo menos comparado con mi silueta, que más que de mujer parece de hombre. Me ha sonreído.

-¿Romina verdad?

¡Me esta hablando!

-Emm..sí. Y tu ¿Raquel?

-Sí.-Me sonríe.-¿Trabajas en la empresa de mi padre, no?

-¿Como lo sabes?-Me sorprendo.

-Te he visto varias veces trabajando en la oficina.-Sonríe otra vez.

El silencio reina nuestra conversación, y sudo.

-Romina, ¿quieres agua?

-Emm..bale.

Hemos entrado a la cocina de la gigantesca mansión. Ha llenado un vaso con agua fría y me la ha dado. He bebido el vaso entero sin decir nada. Nunca había estado tan nerviosa. Sé que no va ha pasar nada, estoy casada con un hombre maravilloso y tengo un hijo maravilloso, y yo tengo treinta años, y ella tendrá alrededor de 19... Y lo más importante, soy mujer y ella también. 

-Romina, ¿quieres ver mi habitación?

No aparto la mirada de su cuerpo.

-Claro.-Ahora soy yo la que sonríe.

Me coje de la mano, y subimos corriendo hasta su habitación. 

Desde su habitación se ve el precioso mar, reflejando la luna llena y las estrellas que la acompañan.

Me he sentado en su cama y acto seguido se ha acercado hacía mi y me ha susurrado lo siguiente:

-Te deseo.

Le he respondido con la mirada y se ha quitado su minivestido, así dejando ver su maravilloso cuerpo a la luz de la luna. 

Se ha sentado sobre mi y me ha dado un beso caliente en la boca. La he abrazado y nos hemos besado durante un rato. 

Me he desnudado, y me he tumbado sobre la cama. Se ha tumbado sobre mi y al rozar sus pezones con los míos se me ha puesto la piel de gallina.

Me ha besado en la boca, luego en el cuello, después me ha rodeado los pezones con su lengua, ha seguido haciendo lo mismo hasta llegar a mi clítoris. Mueve su lengua perfectamente, porque me esta dando placer. Me ha metido un dedo por el agujero del culo. Ha llegado mi turno. La he besado y he metido un dedo en su vagina, luego otro, y hasta he conseguido meterle la tercera.

Nos hemos estado besando y haciendo todo tipo de travesuras, toda la noche.

Fin.


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