Rutina

Por
Enviado el , clasificado en Reflexiones
953 visitas

Marcar como relato favorito

Y se repetía en su cabeza que nada tenía porque salir mal, pero al mismo tiempo trataba de luchar contra ese conformismo y “sobreesperanza” que escuchaba de los otros y que lastimaba hasta su último pensamiento. ¿Por qué todos intentaban esconder sus miedos cuando se trataba de los problemas de los demás? Se preguntaba una y otra vez. Cansada y agotada sentía como el nudo de su garganta cada vez se hacía más grueso y casi dolía al tragar, como un sutil hormigueo recorría sus brazos desde los hombros a la punta de cada uno de sus dedos, como sus pensamientos volaban tan rápido en su cabeza que apenas tenía tiempo de observarlos y reflexionar sobre cada uno de ellos. Nada tiene sentido, se decía una y otra vez. También se culpaba por ser tan cobarde y no ser capaz de volar. Volar sola y lejos sin mirar a atrás. De romper cada vínculo, cada idea preconcebida, cada cosa que se esperara de ella… y empezar de cero. ¿culpabilidad? ¿cobardía? ¿dependencia? ¿miedo? ¿inseguridad? ¿fracaso? Su mente la traicionaba por segundos y ella se escondía en su pequeña coraza cada día más y más. A menudo su corazón palpitaba muy deprisa y sus ojos luchaban por no ser inundados de tristeza. Cada músculo de su cuerpo combatía contra su cabeza, ellos morían por escapar, pero ella prefería no enfrentarse al miedo que genera eso de empezar a vivir de nuevo. ¡Maldita cobardía!, se repetía una y otra vez mientras se disponía a seguir con su rutina.


¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales

Denunciar relato

Comentarios

COMENTAR

(No se hará publico)
Seguridad:
Indica el resultado correcto

Por favor, se respetuoso con tus comentarios, no insultes ni agravies.

Buscador

ElevoPress - Servicio de mantenimiento WordPress Zapatos para bebés, niños y niñas con grandes descuentos

Síguenos en:

Facebook Twitter RSS feed