"Un día cualquiera" 1ª Parte

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7: 00. AM. Me he despertado esta mañana con nuevas ansias de luchar, me siento feliz he encontrado trabajo después de dos años en paro, perdón en paro no, mi gobierno dice que si estoy haciendo cursillos no estoy parado, he hecho veinte cursillos en este tiempo de reeducación laboral. No importa por fin hoy empiezo a trabajar, doy al interruptor de la lamparilla que hay sobre la mesita. ¡Leches! No me acordaba que ayer nos cortaron el suministro eléctrico por falta de pago. No importa, con el dinero que me dejo ayer mi cuñado, tomaré café en el bar y me compraré un paquete de tabaco, hace una semana que no pruebo un cigarrillo, no por temas de salud sino mas bien económicos.

Procuro no hacer demasiado ruido para no despertar a mi esposa, últimamente no hacemos el amor apenas y la tensión flota en el ambiente, recuerdo aquella canción de el Último de la fila, "Cuando la pobreza entra por la puerta el amor salta por la ventana".

7: 15 AM. Me dirijo a la maquina expendedora de tabaco esperando oír esa voz agradable que me diga su "tabaco gracias", dejo caer las monedas por la rendija y pulso el botón correspondiente al ducados, me asombra ver como tiene el mismo precio que el Winston cuando toda la vida ha sido mucho mas barato, será por eso de la igualdad.
"Tome su tabaco asesino del medio ambiente".¡Joder, parece la voz de la Pajín!. Me alejo rápidamente del bar cuando toda la gente sentada frente a la barra se vuelve hacia mi con cara de pocos amigos.
Después de diez minutos en la parada del autobús me ha recogido un conocido con su auto, va en mi misma dirección y no le importa acercarme si le doy diez euros por la gasolina, me parece un poco caro solo se desvía doscientos metros de su lugar de destino. Sin decir ni "mu" le doy el billete, me ha dicho que los autobuses están en huelga y que tal vez me toque esperar una hora para poder atrapar uno.


14: 00.PM. Es por fin medio día, tanto tiempo sin trabajar me ha dado un hambre feroz, también un buen dolor de espaldas después de estar haciendo toda la mañana tabiques en la obra donde he empezado por fin a trabajar. No importa soy feliz, tengo trabajo. Voy a una tienda que hay cerca de la obra y compro una botella de cerveza con el dinero que hemos juntado entre cinco compañeros que están en la misma situación económica que yo y que también es su primer día de empleo,  me voy a poner las botas, cerveza para comer,  soy consciente de que saldremos a trago por barba pero no importa, soy feliz tengo trabajo.
Al salir de la tienda alguien me increpa. ¡Tendrá poca vergüenza, a su edad y de botellón!.Me vuelvo se trata de dos mujeres de edad avanzada que circulan por la otra acera.
"Señoras es  para comer en el trabajo".-Les explico
"Eso se lo cuentas a tu abuela. ¿Te crees que somos tontas?
"Tontas no,pero si podían ser mis abuelas".- Andé rápido para no escuchar lo que comenzaron a soltar por esas bocas de labios arrugados como pasas.


Estábamos sentados en corro preparándonos para comer cuando se acercó el encargado de la obra, de soslayo miró el tuper que tenía frente a mi y donde se hallaban tres hamburguesas,
 bastante frías por cierto.


"Pero hombre, ¿acaso no oyes a nuestro gobierno decir que las hamburguesas producen una obesidad espantosa?".-
"¡Joder! Tengo 42 años, mido 1,75 m, y peso 74 kg. No creo que ese sea mi problema".- No puedo evitarlo y dirijo mi mirada hacia esa protuberante barriga que le impide verse el miembro cuando va a orinar. Se da cuenta y soltando un bufido se aleja. Menos mal que habíamos vaciado la cerveza en una botella de plástico opaco, de zumo de melocotón creo que se trataba y que habíamos previamente lavado.


18: 00 PM. Hemos acabado la jornada y nos estamos lavando como los gatos con el agua fría de la manguera, de nuevo el viejo anuncio de michelin se acerca a nosotros.
"Señores lo siento pero tengo que daros una mala noticia".- Todos le miramos esperando que acabase de hablar, algo parece que se le ha atragantado y no pueda continuar. Tras un espacio de tiempo que se nos hace una eternidad prosigue.-" La empresa va ha cerrar". "Don cesar se ha fugado con todo el dinero que ha podido recoger de las facturaciones y de algunos bienes que había vendido antes, sin que nadie lo
supiera. La empresa esta caput".- Acaba con un gesto de su dedo pulgar señalando el suelo.
¡Adios al trabajo!. ¡Adios al jornal que habíamos trabajado y que no cobraremos ni de coña!.

Salgo del perímetro vallado de la obra y me encuentro a mi hermana y mi cuñado esperándome fuera, me han traído mi auto, le han cambiado los dos neumáticos que tenía destrozados cuando se han enterado de la huelga de transportes públicos, y estos dos ángeles me lo han traído para que pueda volver a casa.
Después de explicarles lo ocurrido con el trabajo, se marchan con otro vehículoque también han traído, este de su propiedad y que esta bastante mejor que el mio. Emprendo camino de regreso a esa casa sin luces que me aguarda.
18:15 PM. ¡Vaya día!, ya la he vuelto a liar, acabo de pasar por un radar fijo a 120 kilómetros por hora. Hace poco han cambiado las limitaciones de velocidad en autovías y autopistas y lo máximo permitido son 110 km/h, de seguro que pronto me llegará la notificación para que abone los 100 euros de multa, a 10 pavos por kilómetro que he sobrepasado me va a salir la broma.
Me encojo de hombros y continuo mi marcha. ¿Que se le va hacer?. Ya no pueden ocurrirme mas cosas hoy. Cuan equivocado estoy, antes de llegar a la salida de la autovía que me debe llevar a mi destino revienta uno de los neumáticos que no han sido reparados, no reproduzco los tacos que se escapan de mi boca por si alguna persona casta lee este relato alguna vez.

Ya he bajado el gato tras haber cambiado la rueda por la de repuesto, y estoy dándole un repaso a los tornillos de la rueda cuando los dos motoristas de la guardia civil paran sus maquinas  junto a mi coche, uno de ellos se coloca junto a mi mientras el otro esta pendiente de que los demás vehículos se desvían de la zona donde nos encontramos lo suficiente para que no pueda suceder un accidente.
"¿Necesita ayuda?".-Me pregunta después de haberme dado las buenas tardes y yo haberle respondido con la misma frase. No se que coño de buenas tardes, pero la educación ante todo.


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