Voltear la página.

Por
Enviado el , clasificado en Microrrelatos
1801 visitas

Marcar como relato favorito

Sentí como si de un momento a otro esa habitación dentro de mí hubiese quedado completamente vacía. En mi pecho, muy profundo ya no se sentía ningún paso desorientado, ningún grito confuso, ninguna falsa alegría. Ninguna rabieta golpeaba el suelo de mi alma. Y el miedo a lo posible ya no acariciaba las paredes de mis recuerdos. Había un silencio tan sereno que podía escucharlo como unas corcheas saltarinas y otras fusas desquiciadas. No era cálido, ni frío. No me agradaba, ni me disgustaba.  Sentí como la puerta se cerraba: lenta, pesada, muda y definitiva.


¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales

Denunciar relato

Comentarios

COMENTAR

(No se hará publico)
Seguridad:
Indica el resultado correcto

Por favor, se respetuoso con tus comentarios, no insultes ni agravies.

Buscador

ElevoPress - Servicio de mantenimiento WordPress Zapatos para bebés, niños y niñas con grandes descuentos

Síguenos en:

Facebook Twitter RSS feed