CON LOS HECHOS

                                               CON LOS HECHOS

Hay gente muy dada a buscar “riquezas” a costa de lo que sea y de quien sea. Sin darse cuenta que la dignidad no debería venderse ni la ética comprarse. Y hay quienes son capaces de sacrificar todo cuanto obedece a una decencia y se convierten en arribistas, para los que ellos son únicas pretensiones es generar la mayor riqueza posible y ascender en el escalafón social. Negando por supuesto cualquier civismo y atisbo de humanidad. Los hay también muy dados que dada su poca moralidad pueden sacar beneficios de situaciones de privilegio o indefensión y de debilidad, a veces muy pretendida. Tales casos bastante extendidos entre desalmados obedecen a tales bajezas humanas. Habiendo de pretender desde quienes tienen en sus manos el destino de todos,

empezando por aquellos que nos gobiernen no viviesen para una ambición sin límites capaces de todo y suponiendo un empobrecimiento de valores y faltos de cualquier decencia. Y empiecen a valorarse un obrar que ponga de relieve lo que debería ser justo, respetable y honrado. Y saber que en esta vida no hay que buscarse falsas glorias llenas de vacío interior y “pobres triunfalismos” que dejen de manifiesto una falta de humanidad por los que debería regirse toda persona y sociedad. Debiendo atenderse a criterios que no nos alejen del ser personas y el que se corresponda con los hechos.