SUEÑOS Y PESADILLAS (CONTINUACIÓN)

Félix era un hombre de cincuenta años que en aquel momento se hallaba almorzando en

compañía de su elegante y atractiva esposa llamada Patricia que era una mujer rubia y de ojos

azules, la cual a la hora de los postres le informó:

- Este sábado por la noche los Puig nos han invitado a cenar en su casa. ¿Te apetece ir?

- Ah; bueno... - respondió él indiferente.

De repente Félix miró fijamente a su cónyuge y le acometió un turbio deseo que en ocasiones

se le manifestaba de un modo obsesivo.

"Hace ya algunas noches que no puedo copular con ella. Sólo me excito si me hacen lo que a

mí me gusta, que es que me azoten con un cinturón. Desde cuando en el Instituto en mi

adolescencia me ataron a un árbol del patio y mis compañeros de estudio me flagelaron,

debido a mi sensibilidad se me ha quedado esta fijación en la mente, y es lo que me hace

eyacular. Así qué. ¿Se lo digo a Patricia, o no se lo digo? Si le pido a Patricia que me haga

este favor, que me azote para poder ir con ella, con lo puritana que es pondrá el grito en el

cielo; me tratará de loco, y tal vez me abandonará. Es por eso que para poder dar satisfacción

a mi fantasía erótica acudo con fecuencia a una "profesional" pagándole lo que sea" - pensó

Félix con una angustiosa desazón.

A tenor de este oculto sentimiento de culpa ya que Félix había sido educado en una rígida

moral religiosa, aquella noche tuvo una terrible pesadilla.

"Félix está en su casa, y se le ocurre ir a mirarse la cara en el espejo del lavabo.  Al parecer

en ella que mi cara, sin dejar de ser la mía, es también la del diablo."

Y es que en el sueño de Félix ha aparecido la SOMBRA que es la figura aruetípica que contiene

los aspectos negativos del inconsciente. Según Froid, nuestra mente se estructura con el YO

consciente, el SUPERYO que nos hace de censor para poder andar por la vida, y el ELLO que

es la parte más animal que tenemos. En este caso Félix habría conectado con su ELLO, que

le reclama el derecho a vivir con plenitud, puesto que él trataba de esconderlo para estar en

paz con su mujer.

Vale decir, que el arquetipo de la SOMBRA se puede manifestar de muchas maneras, que no

dejan de asustar al sujeto.

En cambio su primogénito que se ha quedado sin trabajo, y debido al mal contexto laboral

no ve la salida del túnel, una noche sueña que va de viaje.

"Él en su vida onírica está en una estación de tren. Compra los billetes, y lleva un ligero

equipaje. Al fin sube a un vagón y el vehículo se pone en marcha. Durante el trayecto hace

amistad con otros pasajeros, y al fin llega a una estación de una ciudad determinada y se da

cuenta de que ha llegado a su destino."

Ocurre que al primogénito de Félix a pesar de su estancamiento laboral, su inconsciente le ha

anunciado que en su vida se va a producir un cambio importante, que en unos casos puede

ser sólo psicológico, pero en otros puede ser de situación en todos los sentidos. Y así ocurrió.

al primogénito de Félix le salió la oportunidad de ir a trabajar a una multinacional en Alemania,

y allí se fue sin pensarlo dos veces.

Félix que era un hombre bastante materialista, tenía un hermano menor llamado Antonio que

era todo lo contrario del masoquista. Pues Antonio no se identificaba demasiado con los

mezquinos y egoístas anhelos de quienes le rodeaban, por lo que solía pensar: "¿Qué pinto

yo en este mundo?" Y es que en el fondo de su conciencia Antonio era un idealista; un hombre

con una evolucionada inteligencia emocional, y racional que aspiraba a una utópica justicia

Social.

Hasta que una noche tuvo un sueño singular.

"Una serpiente describe un círculo en torno al durmiente Antonio, que está inmóvil en el suelo

como un árbol".

Sin ninguna duda este fue un sueño mandálico, que es una palabra del complejo idioma

sancrito, cuyo simbolismo emana de un inusitado YO espiritual, que a su vez forma parte de

un inconsciente colectivo, y los símbolos de estos sueños siempre se expresan mediante

círculos o cuadrados; o ambas cosas juntas.

En consecuencia Antonio un día anunció a la familia que se iba a África a través de una ONEG

para ayudar a los más necesitados del planeta, porque según él todos formamos parte de la

familia humana con distintos matices.

Félix tenía asimismo una hija adolescente llamada Laura, que al parecer estaba demasiado

vigilada por su puritana madre Patricia.

De manera que la joven más de una noche tenía la misma terrorífica pesadilla.

" Laura camina por el largo pasillo de su casa, y de algún oscuro rincón, le sale al paso una

bruja que la persigue como un chacal para hacerla suya, mientras ella corrre presa del terror

hasta que ve una escopeta en un sillón, la coge y le pega un tiro haciendo que la bruja se

desplome muerta en el suelo. Mas la bruja resucita, y va tras la chica... hasta que ésta se

despierta en su cama bañada en sudor".

Y es que Laura tenía un problema con su madre, que a duras penas la dejaba madurar; la

asediaba constantemente. Así que la bruja del sueño era la actitud de la madre bajo la

apariencia de bruja. Es un sueño que los especialistas relacionan con el cuento infantil de

"La Casita de Chocolate" en el que la bruja que quiere acabar con Hansel y Gretel es la misma

madre por haberlos abandonado en el bosque.

Patricia, que no dejaba de ser una mujer muy sensible ya que cantaba en una coral de su

parroquia, una noche tuvo un sueño lúcido.

"Ella va a casa de sus padres, donde allí está de visita un antiguo novio que le dice que aún

la quiere".

Pero Patricia a pesar de su senbilidad no se deja engañar.

"- ¡Bah! Esto es un sueño, y cuando quiera me voy a despertar - responde ella con convicción.

Y es que Patricia en su experiencia onírica tiene una conciencia tan viva como si estuviese

despierta, que a su vez es capaz de echar de la casa a su viejo novio, y de decirles a sus

padres que cuando realmente vaya a verlos que no le hablen de aquel sujeto. Asimismo,

a Patricia se le despierta la percepción extrasensorial,y el sueño le indica que su padre ha

sufrido un ataque cardiaco, y está a punto de morir...

Como así sucedió en la realidad.

Por tanto el inconsciente que no entiende del tiempo cronológico, es capaz de avisarnos con

los sueños acerca de nosotros mismos, y de nuestrop entorno, y que a veces es preciso

de prestarle la máxima atención.