El Romance Aún Existe

Por
Enviado el , clasificado en Amor / Románticos
1620 visitas

Marcar como relato favorito

Hay veces que una parte de tu Mundo se detiene cuando llega alguien que remece tu ser. Bueno, a mi me está pasando dichas sensaciones. 
Hace años conocí a una mujer trigueña mayor que yo, ojos negros, hermosa y radiante por donde se la mire, con una sonrisa que alegra hasta el más deprimido de los hombres en este Mundo, una mujer tan dulce que si llegas a abrazarla tienes riesgo de sufrir una diabetes fulminante, alegre y muy amable, con una inteligencia y valentía que dice lo que siente.
En el intertanto, a veces quedaba prendado ante tamaña belleza, el que me dejaba un zafarrancho dentro de mis sentidos y mi corazón. Esta reyerta no me daba cuenta en mis días donde vivía en la zona Pencopolitana, pero hubo un incentivo para ser más osado y más enérgico con el fin de mostrarle que aún hay gente que la quiere tal y como es, puesto que ha sufrido muchas desilusiones en su vida que no quiere más guerra. No fue necesario que lo dijera, lo pude descifrar con el reflejo de sus bellos ojos. 
De pronto, una amiga advirtió de lo sucedido (para no decir que me chivateó y me traicionó de la manera más desagradable que se puede imaginar) y esa misma mujer me ha cerrado la puerta en las narices de toda pretensión. En consecuencia, sufrí una desilusión que pensaba en que me iba a tragar la tierra, pero después me di cuenta que no estaba haciendo las cosas mal porque hice de todo menos cortejarla de forma descarada y alevosa, con artilugios que denotaban la galanura y la caballerosidad que pude ofrecer como mis únicas armas para acercar a su corazón. Prefiero mil veces ser de esa estirpe que un tipo moderno facilista, que con dinero y una cara bonita o cuerpo bonito, garantiza un éxito asegurado en el tema amoroso. 
No se lo que quiere ella en estos instantes, pero me he dado cuenta que mi cariño y respeto hacia ella siguen vigentes, lo que prefiero congelar esta iniciativa para empezar de cero y recuperar el terreno perdido. Si me hubiese rendido ahora, era más preferible morir porque no hay peor derrota que una lucha con la toalla lanzada. Me ha tocado muy complicado y con harto ripio esta vida, sin embargo a punta de esfuerzo, humildad, valentía y garra he podido sobrellevar todos esos obstáculos que me puso el destino y he salido adelante como los uruguayos y su clásica "Garra Charrúa", luchando hasta el último instante y con tintes dramáticos que rozan deliberadamente la epopeya.
Es verdad, aún puede haber romance en este Universo tan superficial y vacío, que lo guapo, lo millonario, lo lujoso o lo entrador está a la orden del día. Solo hay que hacer la iniciativa y romper los esquemas, hablar desde el corazón entrelazado con la cabeza y no con otras partes, ser sencillo y humilde, hablar claro y ser honesto, entre otras.
No quiero rendirme ante esta causa complicada, pero hermosa. Es una opción factible de amar y de animar a una bella mujer que aún hay gente que la respeta y que el romance aún no está extinto.
Cuando veo el hermoso rostro de Carolina, pienso que el amor puede romper todas las barreras que existen en esta tierra en que vivimos. 

 


¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales

Denunciar relato

Comentarios

COMENTAR

(No se hará publico)
Seguridad:
Indica el resultado correcto

Por favor, se respetuoso con tus comentarios, no insultes ni agravies.

Buscador

ElevoPress - Servicio de mantenimiento WordPress Zapatos para bebés, niños y niñas con grandes descuentos

Síguenos en:

Facebook Twitter RSS feed