El papagayo se parapetaba contra las finas cuerdas metálicas de su nueva
jaula, acababa de darse cuenta que está jaula dorada, es mas grande que la anterior.
El papagayo enamoradizo fecundó a la anterior hembra en su vieja jaula anterior estrecha, y vieja y en un solo día la despelucho.
Usando como parapeto aquella vieja y mal oliente jaula, donde siempre ponía entre
la espalda y esos fríos barrotes, el cuerpo de su pobre víctima.
Llevaba tiempo solo en su nueva jaula, el papagayo según el veterinario tenia paperas.
El dueño, es un aficionado a la papiroflexia y todos los días para que no se sienta solo
le fabrica pajaritas, y le llena la jaula de multitud de bellas hembras.
El papagayo ronda, seduce, y enamora, a ese elenco, de bellas pajaritas a las que sin
aviso previo este papagayo con paperas, las despelucha y fecunda.
Comentarios
COMENTAR
¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales