Quiero ser como tú. ¡Que no te ciegues
a un amor imposible como el nuestro!
Ser así, como tú, que aunque lo niegues,
te llevaste mi voz en un secuestro.
Te llevaste mi voz, que enmudecida
Ya no pudo decirte, cuánto te amo.
Pero al ser como tú, sin esta herida,
te daría a conocer de mi reclamo.
Puedo ser como tú y amarte un poco.
La pasión no se pierde en la distancia.
Te amaré y tú sabrás que si te toco,
es que supe tener perseverancia.
¿Quién al ser como tú, no ha sido amada?
No es posible pensar tal disparate.
Para un ser como tú, no existe nada
que le pueda afectar. Sólo a un orate.
El orate soy yo. ¿Quién lo diría?
Que te amó sin tener correspondencia.
Y que al ser como tú, recobraría
la razón, con alguna penitencia.
Voy a ser como tú, pero no quiero
recibir la limosna de tus besos.
Porque a un ser como tú, sólo requiero
darle amor, ¡De la médula a los huesos!
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