Relax en el sexo

Era una pareja, que cuando se conocieron a pesar de que los dos habían estado casados, en aquellos momentos estaban libres de ataduras, saliendo juntos por un corto espacio de tiempo. Hasta que un día se pusieron de acuerdo en tener el primer encuentro a solas en la casa de ella.

Al principio a la hora de los escarceos amorosos, la mujer estaba siempre tan tensa y preocupada por tener que enseñar su cuerpo pasado de kilos a su compañero, que solo hacia el amor para complacerle en una habitación a oscuras. Aunque con ello no se le iba esa preocupación y a pesar de aparentar lo contrario no disfrutaba nada con el sexo, por eso deseaba que él terminara lo más pronto posible, para dar por terminado el acto sexual que de vez en cuando llevaban a cabo.

Sin embargo, al hombre, que no le importaba los kilos que dé más ella tuviera, aquello de esconderse tanto no le parecía normal. Aunque en los primeros días de la relación, no se daba verdaderamente cuenta de lo que sucedía y creía que ella gozaba tal como él lo hacía, por eso estaba muy animado con aquella mujer, a la cual empezaba a querer.

No obstante, según pasaba el tiempo, el hombre empezó a desconfiar de aquella actitud, pues creía que con lo que se conocían, ya era hora de que ella tuviera más confianza y le dejara contemplar su cuerpo desnudo como él se lo dejaba ver a ella. Por eso le insistía en que no tuviera tanto miedo a la hora de desnudarse a plena luz delante de él.

Entonces fue cuando ella le dijo la verdad de lo que le pasaba y que no era otra, que ella era frígida no sintiendo ningún placer al hacer el amor y que eso fuera lo que sirvió para romper el matrimonio con su ex marido. Aunque esta vez no quería perderlo a él también y que haría lo posible para complacerlo.

El hombre, al principio no sabía cómo salir de aquella situación tan incómoda. Aunque como ya quería a la mujer, se dispuso a ayudarla, convenciéndola de que tenía que ir a un psicólogo, lo que nunca había hecho y después de luchar mucho con su problema, por fin consiguió que ella disfrutara haciendo el amor como él lo hacía, lo que hizo estabilizar a la pareja.