Fuego

Me gusta cuando me tocas. Me gusta cuando me miras. Me gusta cuando sonríes. Me gusta cuando lloras. Me gusta cuando te enfadas. Me gusta cuando te emocionas. Me gusta cuando susurras.

Me gustas con tus locuras, con tus ideas, con tus manías, con tus defectos, con tu cuerpo,

con tus deseos, tus aficiones y tus costumbres.

Me gusta cuando me miras fijamente y mi cuerpo se engarrota.

Eres electricidad. Esa electricidad que me da vida, energía.

Pones mi vello de punta.

Una sobrecarga.

Chispa.

Fuego.

Me gusta cuando callas. Me gusta cuando hablas. Me gusta cuando gritas. Me gusta cuando dices mi nombre. Suena especial. Suena diferente. Me gusta cuando te miro. Me gusta cuando me emocionas.

Mi sobrecarga.

Mi chispa.

Mi fuego.

Pero en la sombra, en mi sombra.

En la sombra de mi ser.

Tengo miedo. Miedo de expresarlo y no poder volver a disfrutar de tu mirada, tu sonrisa, tu tacto, tu voz.

Una pequeña tortura, que merece la pena.

Mi chispa.

Mi fuego.