El 2090

Actualmente estando en curso el año 2018 padecemos de contaminación y guerras, pero en diez o en quince años, cuando se den cuenta nuestros gobiernos de los daños que hacemos, nuestros esfuerzos se doblaran en contrarrestar nuestros estropicios y en la mitad de tiempo en que lo echamos a perder, habremos limpiado el planeta. La gente tendrá más responsabilidad al procrear y se limitaran a tener de dos a tres hijos la mayoría, aunque algunas excepciones, no mal vistas por supuesto, tendrán los hijos que quieran. Habrá comida suficiente y las armas se exhibirán en museos junto con fotos de todas las barbaridades que cometimos.

Los autos no volarán, pero andarán con energía limpia por autopistas inmaculadas y lisas. Los vuelos internacionales se sustituirán con trenes transcontinentales, y si me explayo con la tecnología, tendremos teletransportadores efectivos, con tan solo una taza de accidente del 0,000001 por ciento. Si vieron la película “La Mosca” entenderán. Pero la medicina tan sofisticada, podrá arreglar esos imperfectos y la cosa será una mínima molestia a comparación de las ventajas que los teletransportadores traerán. Los mismos autos solo serán utilizados muy pocas veces.

Habremos colonizado marte y la luna. Los abuelos que vivan en la tierra podrán visitar a sus familiares, a sus nietos marcianos, con la ayuda de transbordores espaciales que saldrán todos los días a las ocho de la mañana y a la misma hora por la noche, desde las estaciones que todas las ciudades tendrán.  

El planeta, por cierto, se verá más verde de lo que nunca antes se había visto y pájaros hermosos de varios colores volaran por los cielos. Las abejas abundarán y las plantas nunca antes se habrán visto tan preciosas y nunca se habrán olido tanto. La fauna y la flora alcanzara una nueva época de esplendor.