Le di mi tanga y algo mas..... parte 1

Por
Enviado el , clasificado en Adultos / eróticos
11507 visitas

Marcar como relato favorito

Hola!

Antes de empezar me gustaría describirme, tengo 19 años, mido casi 1.60, en cuanto a mi cuerpo no me quejo jiji siempre atraigo miradas ya sea de los conductores que me ven al salir de casa o al andar en el metro o cualquier lugar. Soy delgada, con unas culito algo grande al igual que mis bubis, todo esto acompañado de una cintura pequeña.

Quiero contarte algo que me sucedió hace algunos días, todo empezó después de haber publicado mis primeros relatos, recibí muchos correos, algunos para confesarme que se habían masturbado mientras me leían o cosas por el estilo, no puedo negar el contenido de algunos correos lograron excitarme mucho, incluso llegué a tocarme mientras leía algunas de las propuestas que me hacían jeje.

Pero de entre todos los correos que recibí me llamó la atención el de un chico que me preguntaba si vendía videos eróticos; porque quería le cumpliera algunas fantasías que tenía como verme orinar o meterme algo en mi culito jeje.

Se me hizo interesante su propuesta y accedí a darle mi número para mensajearnos por whatsapp, cumplí casi todo lo que él me pedía, para mí eran cosas nuevas que nunca había hecho como grabarme mientras orinaba, aunque sí fue excitante pensar que alguien se tocaría mientras me veía haciéndolo, siempre me ha encantado provocar eso en los hombres.

Después de varios días de estar hablando me mandó un mensaje diciéndome que me había depositado para que comprara una tanga, no sabía cuál era su objetivo pero lo hice, ese día en especial que fui a una plaza cerca de mi casa para comprar la tanga qué me había pedido me sentía muy caliente; cuando me siento con ganitas normalmente uso faldas cortas y ese día no fue la excepción, en cuanto elegí la tanguita que más me gusto le mande un mensaje para decirle que ya la tenía.

Él me dijo:

-quiero que te metas a un vestidor te la pongas y me la enseñes.

Sentía que mi cara me ardía de la penita que me daba, pero mi cara no era lo único que reaccionaba... entre mis piernas empezaba a sentir como me iba mojando, incluso el roce de mis pezones con mi ropa hacía que me excitara aún más.

Siempre he pensado que el rojo me queda muy bien en especial en la ropa interior, por lo que elegí una tanguita roja muy coqueta, en cuanto termine de leer su mensaje me dirigí a ponérmela, dentro del vestidor me excité aún más pensando que me estaba desnudando para mi amiguito de whats, ese día iba vestida con una falda negra, al quitarme el cachetero que tenía no pude evitar sentir fresco en mi vagina, me di cuenta que había dejado empapado mi cachetero, sentía que necesitaba una buena verga que aprovechará lo lubricada que estaba incluso para que me cogieran ahí mismo dentro de ese vestidor; eran tantas mis ganas que tuve que meterme un par de dedos en mi rajita para consolarme un poco, fue tan rico sentir como se metían sin ningún problema por lo mojada que estaba.

Sentía que ya me había tardado mucho jeje por lo que me puse la tanga que había comprado, me gustaba mucho como me quedaba mi culito se veía muy sensual con ese pequeño hilito rojo que se perdía entre mi culito.

Después de que me admire un poco en el espejo le mande un mensaje a mi amiguito para decirle que había hecho lo que me pedía, me respondió a los pocos minutos diciéndome que si era posible que al siguiente día el me la quitara dentro de su coche; que si aceptaba nos veríamos en el estacionamiento de una plaza que nos quedaba céntrica, a pesar de que no lo conocía ni por foto sentía algo de curiosidad sobre esa situación incluso hasta me sentía excitada al pensar que prácticamente un desconocido se quedaría con mi ropa interior, -pero mi putería pudo más jiji- no quería perder la oportunidad de que alguien más me viera con esa tanguita puesta por lo que dije que si aceptaba.

Él se comportó como todo un caballero y me dio algunas instrucciones. Quería que ya no me la quitara desde ese momento hasta que estuviéramos en su coche (salvo para bañarme). Me dijo que ya dentro de su coche él no me tocaría si yo no quería, eso me relajó aún más porque debo reconocer que sentía algo de duda sobre verlo.

Al día siguiente estaba muy nerviosa pero muy excitada sería la primera vez que vendería mi ropa interior y sobre todo a un desconocido, por la mañana todo transcurrió con normalidad me bañe; al salir de la regadera me puse de nuevo la tanguita roja y una falda tipo colegiala, quería verme bien para mi amigo jiji.

Para llegar a la plaza donde nos veríamos tomé un Uber, creo que si cumplí con mi objetivo de verme coqueta por que el conductor no dejaba de verme, incluso hasta ajustó su espejo retrovisor para verme las piernas.

El trayecto hacia la plaza se me hizo eterno por que el chofer iba muy lento... Quizá porque de vez en cuando "accidentalmente " abría mis piernas ligeramente para que me pudiera observar bien.


¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales

Denunciar relato

Comentarios

COMENTAR

(No se hará publico)
Seguridad:
Indica el resultado correcto

Por favor, se respetuoso con tus comentarios, no insultes ni agravies.

Buscador

ElevoPress - Servicio de mantenimiento WordPress Zapatos para bebés, niños y niñas con grandes descuentos

Síguenos en:

Facebook Twitter RSS feed