Culona con mi marido parte 3

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(La tercera parte del relato)

 

Yo (nuevamente haciéndome la ingenua pregunte).- Que es eso que se escucha de fondo EH?

Andrea (riéndose silenciosamente contestó).- Lo que pasa es que tengo una paleta y la estaba chupando. Ya tengo que colgar estoy algo ocupada. (Y me colgó la muy puta)

Si claro muy ocupada, pero tragándose la verga de mi marido, no se quería perder ni un segundo.

Andrea.- Era tu puta esposa preguntándome por el trabajo, jajajaja me da risa si supiera que te estoy cogiendo, a su maridó con el que duerme todas las noches, me está dando verga como jamás le dio a ella, y con su anillo de bodas en mi pie derecho, que no pienso devolver jajaja, lo peor de todo es que me paga por esto jajajaja.

Lo que ella no sabía es que en realidad lo estaba viendo todo, y peor aun es que lo que decía era cierto, y yo no hacía nada para evitarlo pudiendo hacerlo. Y en cambio solo la estaba grabando.

Mi esposo.- Me pone caliente que hables así de mi esposa, y tienes razón, te estoy dando verga como jamás lo había hecho, y es porque tu si estas bien rica, no como ella que ya esta esta toda vieja y aguada, tu tienes un culo y una tetas maravillosas, y unos pies hermosos.

Andrea.- Ay que bueno que te gusten, porque no me los chupas.

Mi maridó empezó a lamerle sus pies de puta, con mi anillo de bodas en el, le lamia todo el cuerpo hasta llegar a su vagina, donde le metió la lengua entera, y ella empezó a gemir, duraron así un buen rato, y luego exclamo:

Andrea.- Es mi turno otra vez de chupártela de nuevo.

Esta zorra no se cansaba ya se la había chupado como cinco veces y una de ellas conmigo al teléfono.

De pronto se aventó a la verga de mi marido y empezó a chupársela nuevamente, pero ahora lo hacía de una manera desesperada, casi ni respiraba por andar chupándosela, mi marido estaba ya demasiado caliente, con los ojos completamente blancos, estaba a punto de venirse.

Andrea (hincada con ese cuerpazo frente a mi marido, y su verga en su boca).- AHHH  SIII, CORRETE!!! CORRETE!!! CORRETE EN MI CARA!! AVIENTAME TODA TU LECHE!!!, TODO ESO QUE NO LE DAS A TU ESPOSA!!! DAMELO EN LA BOCA!!!

Mi esposo se vino, y empezó a bañarla de semen, la mayor parte cayo en su boca, aunque le cayó en todo el cuerpo, en sus tetas, en su culo, incluso en los pies. Estaba completamente bañada del semen de mi marido.

Finalmente, se tragó el semen que le cayó en la boca, le dio un último beso a mi marido en la verga, él le dio una nalgada y se metieron a bañar. Y después se puso a limpiar la casa.

Ese día llegué igual de noche para no levantar sospechas, aunque que tenía en vídeo, todo lo que habían hecho. Llegué y toqué la puerta (me abrió Andrea).

Andrea.- Bienvenida como le fue en el trabajo.

Yo (sabiendo que eso era muy hipócrita de su parte no le conteste, solamente le pague y ya)

Yo.-(refiriéndome a mi esposo y haciéndome la ingenua).- Oye mi amor y tu anillo de bodas.

Mi esposo.- Creo que se me cayó, al rato lo busco.

Note que la puta de Andrea soltó una pequeña sonrisa burlona, y solamente dijo ya me tengo que ir, vuelvo mañana. Aunque yo sabía a qué iba a regresar en realidad y no era a limpiar la casa.

En un principio tenia planeado enseñarle el vídeo a ambos, para que se dieran cuenta de que lo había visto todo, ya que estaba realmente enojada, pero cambie de opinión y decidí no hacerlo, puede que suene raro, que de hecho lo es, pero ver a mi esposo cogiéndose a esa perra me éxito, así que finalmente no le mencione nada a ninguno de los dos, y ese día me fui con mi esposo a dormir, sabiendo que se había cogido a una puta, una puta que yo mismo había contratado, y encima le había pagado, y saliendo que al día siguiente lo haría de nuevo, y al siguiente, y al siguiente...

Tenía a esta puta, en sus manos para cogérsela cuando quisiera, y yo lo sabía, y aunque si me molestaba bastante, también me excita. Ya para finalizar con la historia, al día siguiente volvió a llegar Andrea, lista para cogerse a mi marido nuevamente de seguro, llegó con una minifalda, que le dejaba ver casi media nalga, una mini blusa, por donde se le salían todas sus tetas, y unos tacones. Ella notaba como mi esposo babeaba por ella, y como yo me molestaba por eso, pero como ya les había dicho, eso es lo que le gusta a esa puta, seducir a mi marido, y que yo me enojé, aunque ya sabía que se iba a coger nuevamente a mi marido, decidí ir a trabajar ese día y los siguientes dejándolos solos, aun sabiendo que esta puta solo iba a cogérselo.

Días después en el trabajo me llamaban de números desconocidos, donde se oían los gemidos de una mujer y los de un hombre, obviamente eran de mi marido y los de esa puta, ellos creían, aunque yo no lo sabía, y pensaban que, llamándome, de teléfonos no registrados, no sabría quiénes eran.

A día de hoy Andrea sigue siendo mi sirvienta, y le sigo pagando, si así como lo oyeron, le sigo pagando por cogerse a mi marido, ella cree que no le se, pero la realidad, es otra por una parte me pone furiosa, pero por otra me excita. Decidí compartir este relato para desahogarme, próximamente, seguiré contándoles lo que ocurre.


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