La locura del desamor

Búscame cuando no te quede nada, yo te estaré esperando. Verás, vida mía, que tu único refugio soy yo.

Si en soledad, pensaste en mí, no es una coincidencia; aun teniéndolo todo, me necesitas.

Cuando reconozcas que ninguna persona es auténtica, verás que sólo conmigo conectas.

Mientras en tus sueños me encuentres, sabrás que no tienes ojos para nadie más, así duerma alguien diferente en tu cama.

Cada que sales y no sabes qué buscas entre la gente, sólo estás buscándome a mí.

Cuando en la noche no puedas respirar, es porque te agobia no tenerme.

Si en el día tiemblas y sudas, no te preocupes, sólo no puedes con mi recuerdo.

No te esfuerces en mantener a alguien en tu vida, sólo yo me voy a quedar.

Reconoce pronto que no necesitas a nadie más que no sea yo.

Acepta que nadie es vital en tu vida a excepción de mí.

Yo sólo cedo ante ti,

yo entrego todo de mí.

Ya tuviste suficiente espacio, ya puedo regresar.

Tienes que recibirme o habrás perdido lo único valioso de tu vida.

Si sientes que no cabes en ninguna parte, es que no sabes cómo interpretar la emoción que te da tenerme.

No corazón, la vida no es efímera, la vida sólo es eterna para nosotros dos.

Vida mía, no necesitas a nadie, SÓLO A MÍ