Somos miedo y amor

Vida mía, siento lo que tú. A mí también me invade el miedo de que todo salga mal y tenga que regresar al rincón del que tanto me costó salir. Sé que temes, lo notó en tu dulce mirada, ¿no lo ves tú también?

Todo miedo se disipa cuando me abrazas, cuando me besas la coronilla y dices que me amas. A veces no respondo, pero llevo tantas cosas dentro que no sé ni por dónde comenzar a explicarte porque te amo tanto. Es gracioso hacerme llamar escritora y que las palabras no fluyan por completo cuando te tengo de frente. A través de este texto quiero hacerte saber que lo que siento es tan intenso como la luz de mil estrellas, que es un hecho que estoy en un punto de no retorno y que, por primera vez en mucho tiempo, no puedo esperar a vivir el futuro. No puedo esperar al mañana porque sé que será contigo y mi corazón brinca de alegría por ello. No estamos destinados a la perfección y probablemente tampoco a la eternidad, pero lo que tenga que vivir, que sea contigo; si se trata de ti yo lo deseo todo.