Por
Enviado el , clasificado en Poesía
527 visitas

Marcar como relato favorito

Cuando noto tu presencia, una serpiente se enreda entre mis cuerdas vocales y me quedo sin habla.

Cuando me armo de valor, energías que jamás he conocido y jamás conoceré me detienen, construyendo un muro impenetrable entre nosotros.

Cuando llego, tú ya te has ido. Y cuando llegas, yo aún no lo he hecho.

Cuando coincidimos, miro y miras hacia otro lado.

Cuando te miro, tú no me miras. Y cuando me miras, yo no lo hago.

Cuando mi corazón está herido y se ha rendido, el tuyo está sano y siempre preparado.

Cuando yo tengo miedo, tú también lo tienes.

Hugo TM


¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales

Denunciar relato

Comentarios

COMENTAR

(No se hará publico)
Seguridad:
Indica el resultado correcto

Por favor, se respetuoso con tus comentarios, no insultes ni agravies.

Buscador

ElevoPress - Servicio de mantenimiento WordPress Zapatos para bebés, niños y niñas con grandes descuentos

Síguenos en:

Facebook Twitter RSS feed