Angeles y Demonios (Jose Maria y Miriam 1 de 1)
Por Merced 54
Enviado el 07/03/2023, clasificado en Ciencia ficción
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ANGELES Y DEMONIOS
(1-1)
José María y Miriam
Viniste en una familia, compuesta de tres niños, dos chicos y una chica, un papa y una mama. Te pusieron de nombre José María. Fuiste un niño muy querido por tus padres y el mayor de los tres. Tu padre era un hombre muy trabajador. Conforme ibas creciendo, también crecía tu rebeldía. A la edad de siete años, empezaste a robar cosas pequeñas, poco a poco se fueron convirtiendo en robos, con objetos de más valor. Por aquellos entonces, empezaste a rodearte de malas juntas, que con el paso del tiempo y al ir cumpliendo años, tus acciones se fueron convirtiendo cada vez mas delictivas. Cuando tenias doce años terminaste en un reformatorio, no si antes, haber introducido a tu hermano, dos años menor en ese mundo tan peligroso y tan difícil de salir. El haber entrado ahí fue lo peor que te pudo ocurrir. Si , te dieron un oficio, aprendiste electricista y fontanería , te sacaste los estudios que tocaban con tu edad. También conociste un grupo de jóvenes, entre ellos varios que habían robado con arma blanca y entraste en la droga. Al salir del reformatorio, eras otra persona. Tenías dieciocho años. Ahora tú te comías el mundo, ahora tu pensabas que ya lo habías aprendido todo. Tu hermano también entro en las drogas, terminando muriendo del sida. Tu terminaste en la cárcel, con una vida de delincuencia detrás de ti y con varios años encerrado. Parecía que todo se volvía a repetir. Tu vida, a la edad de veinte nueve años volvía a estar llena de errores, un nacimiento tras otro. Viéndose con claridad Y pronosticando claramente, que volvería a ser doloroso para todos, si algo no cambiaba en ese destino.
Mientras tanto Miriam fue creciendo feliz, se caso muy jovencita, pues se quedo embarazada, tuvo dos hijos. Pero por circunstancias del destino, se quedo viuda con tan solo veinte cinco años. Su marido murió de un accidente de coche. Su vida, hizo un cambio drástico, pues descubrió que su esposo tenía dos familias, eso la destrozo. Se quedo viuda con tan solo veinticinco años y dos hijos de tan solo cinco y cuatro añitos, sin trabajo, teniendo un futuro en blanco, sin encontrar salida alguna. Se puso a trabajar en un hostal de un pueblo cercano a su ciudad. Cambio el domicilio donde nadie la pudiera señalar con el dedo, por su marido y se dedico a sus hijos. Pero no era suficiente, necesitaba hablar con alguien, necesitaba desahogarse, conocer a alguien nuevo, que no la hubiera conocido antes. Decidió apuntarse, en una ONG, donde ayudaban a personas solitarias de otros puntos del mundo. Para escribirse con presos de otras partes de España, ayudándolos, intentando animarlos a estudiar, reformarse o tan solo hablar. También con enfermos que necesitaran ayuda moral. Abro con sus padres y le aconsejaron que se escribiera con un preso, pues cuidar y ayudar a los enfermos en su situación, le llevaría un tiempo que en ese momento no tenia. Escribiendo cartas con otras personas, pensaron los padres que no le ocuparía mucho tiempo, pudiendo dedicarse a sus hijos al mismo tiempo que el escribir le serviría de terapia.
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