Una historia con un gay

Viajaba en una flota. Se sentó un muchacho mayor, como de 20 años, muy amable. Dialogamos parte del recorrido. Cuando ya oscureció todo era silencio. Bueno algo música muy suave y oscuro. En un momento su mano agarro la mía y me la acarició. No le di importancia, pero unos minutos más y tomó mi mano y la puso en su miembro erecto. Y empezó a que se la frotara, mi sensación fue muy extraña y la quise retirar, pero no me dejaba. Por fin lo logro, pero para mi sorpresa me hizo inclinar mi cabeza para que se lo chupara, y estuve muy cerca de hacerlo, pero mi reacción fue muy fuerte. No pasó 5 minutos más tarde, se bajó de la flota. Y quedé con la sensación de haber tocado otro miembro.