Inicio de la vida lujuriosa con mi esposa

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En el primer relato les conté de forma genera lo que hemos hecho con mi mujer, pero todo tuvo un inicio, en lo individual como en pareja. Yo ya había tenido una novia con la que hicimos tríos y algunos intercambios de pareja; cogíamos con amigos y amigas y era delicioso... hasta que ella me dejó porque conoció a uno que tenía una verga enorme (según me dijo ella... y yo la tengo normalita, de seis pulgadas, circuncidada y un poco torcida a la izquierda) y la del otro le gustó más, especialmente porque ella, a pesar de la edad tan joven, tenía una panocha muy grande y bastante floja. Y por eso a mí me gustaba más meterle la verga entre el culo porque me la apretaba más.

La que es mi esposa por más de 20 años fue mi cuarta novia y empezamos a tener sexo desde el primer día y los tríos e intercambios, con hombres y mujeres, varias semanas después. Y todo empezó porque a mí me excita muchísimo que me cuenten las personas con las que follo, lo que han hecho sexualmente en su pasado. Que me den destalles y descripciones muy gráficas. Formas, colores, olores, sabores. Eso me hacer hervir el cerebro. Y lo mismo sucedió con mi esposa cuando yo le pedí que me contara sobre su pasado sexual y sus experiencias... y le expliqué por qué eso me encanta. Ella me comprendió y aunque con un poco de timidez al principio, me contó de los dos novios que tuvo (ya hablaré de ellos más adelante) y del sexo que tuvieron.

Al principio me contaba cosas generales, pero yo le hacía preguntas más específicas y ella las respondía, de manera que al poco tiempo de estarme contando sus experiencias, ya los dos estábamos hirviendo. Ella se dio cuenta que contarme eso y la forma como yo respondía, le ponían hirviendo. Era su comienzo como exhibicionista ante mí. Mientras ella me contaba yo le metía mano, la pajeaba, le metía los dedos entre el coño o le jalaba los pezones (que tiene enormes y oscuros) y también le metía la verga entre la panocha, suave y despacio... y terminábamos teniendo unos orgasmos enormes, más que cuando cogíamos sin decir nada de eso. Así que aprendió la delicia de coger hablando cochinadas y expresando todo lo que se piensa, se siente y se desea. Ella también relacionó el placer con las historias que me contaba... y con las que quiso que yo le dijera.

Y así me dijo que quería que yo le contara sobre mis experiencias sexuales e hicimos un pacto de nunca ponernos celosos o molestos por lo que nos contáramos. Y ya ella había comprobado que a mí sus historias reales me volvían loco de placer. Y me dijo que a ella también la calentaba mucho pensar en todo lo que yo había hecho con otras mujeres. Yo ya le había contado sobre mis noviazgos anteriores y de lo "especial" que había sido con mi primera novia, pero sin dar detalles. Así que cuando le dije TODO lo que hacíamos ella se volvió loca de placer y me preguntaba más y más y quería que le repitiera las partes que más la calentaban. Y sus orgasmos eran enormes. Así que decidimos que también haríamos tríos e intercambios, con hombres y mujeres. Ella sólo había conocido dos vergas antes de la mía... pero quería "reponer" el tiempo.

Y el primer trío lo hicimos a los pocos días. Con mi amigo Gustavo. Era el más indicado; no sólo porque con mi primera novia también había sido el primer trío para ella, sino porque fue Gustavo quien me inició en el sexo. Yo hasta ese momento sólo me había pajeado y visto porno en revistas, pero con Gustavo se dio la oportunidad de tener sexo con una persona real y no sólo con mi mano. No fue homosexualidad por parte de ninguno de los dos. Simplemente éramos jovencitos experimentando sexo real y completo, más allá de hacernos pajas en solitario. En esa época para nosotros era bastante difícil tener sexo con mujeres, así que fue ideal que pudiéramos tenerlo entre nosotros. Y Gustavo y yo cogimos durante unos tres meses hasta que los dos conseguimos novia. Pero el gusto bisexual nos había quedado. Por eso cuando con mi primera novia tuvimos tríos e intercambios, yo siempre tuve más de algún tipo de sexo con los hombres que participaron con nosotros. Y ella también lo hizo con las mujeres de ese tiempo (ya contaré su historia más adelante).

Así que el primer trío de mi esposa fue con Gustavo. Y a ella le encantó, no sólo coger con otro... frente a mí... sino que dos hombres nos la cogiéramos al mismo tiempo. Gustavo se la cogió de todas las formas y por todos lados. Y también ella sintió por primera vez dos vergas al mismo tiempo... una en su concha y la otra en el culo... y también las dos a la vez dentro de su panocha. Y aunque Gustavo tiene la verga pequeña y corta, de 4 pulgadas, ella tuvo mucho placer... físico y mental. Además Gustavo la tiene bastante oscura y la mía es rosada... y tiene prepucio. Y ella gozó chupando y jugando el pellejito y el sabor y el olor de esa pija. Y la de él es recta y la mía torcida a la izquierda. Total, una verga muy diferente... y nueva. Sentir que otro hombre la llenaba de semen... frente a mis ojos la volvió loca de placer. Y el sabor y el olor del semen de nuestro amigo le encantó y tragarse todo el semen... ella es una mamadora de verga increíble. También ese mismo día hicimos varias lluvias doradas y ella amó sentir cómo la orinamos y ella orinarnos a nosotros... y después abrazarnos y tocarnos y olernos y chuparnos los cuerpos. Y por supuesto que Gustavo y yo también tuvimos sexo completo ese día... frente a mi esposa. Y ella estaba fascinada con lo que veía, oía y olía.

Y así fue el inicio de lo que ahora son más de 20 años de lujuria total entre nosotros.

Encontrar una mujer para que cogiera con nosotros, o por lo menos con ella y así conocer el placer de la bisexualidad, nos llevó varias semanas más. Pero al fin lo logramos al contactar con una antigua compañera de colegio de mi esposa, que tenía en ese entonces fama de lesbiana y de acosar a sus amigas. Y resultó que sí era lesbiana y estuvo muy feliz de cogerse a mi esposa y enseñarle la delicia de coger entre mujeres... pero no quiso coger conmigo por ser totalmente lesbiana. No nos importó. Había que aprovechar la oportunidad de que mi esposa sí cogiera con ella y ya después podríamos encontrar a otra mujer o parejas donde los dos fueran bisexuales. Esa primera vez cogieron como cuatro horas y siguieron los dos meses siguientes. Pero el objetivo era hacerlo juntos y ella verme con otra mujer... como yo la vi con Gustavo.

Ya contaré de la primera pareja... esperamos sus comentarios.


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