Con una amiga así, quien necesita novia #1
Por Mathis
Enviado el 23/07/2025, clasificado en Adultos / eróticos
981 visitas
Esta historia de mi vida es tan surrealista que necesitaba contarla porque parece de película, y no podría contársela a nadie de mi círculo cercano porque sería exponer a la otra persona, pero alguien en este mundo tiene que enterarse que estas cosas pasan y para mí es como haber ganado la lotería.
En 2023 hice unos cursos de Inglés para reforzar mis conocimientos y conocí a mi amiga L (es la inicial de su nombre y no voy a dar más info). Nos sentamos cerca y compartimos tareas u orales juntos. Así comenzó todo.
Durante los 4 meses que duró el curso nos empezamos a llevar muy bien y para el trabajo final nos juntamos por primera vez fuera de la clase. Finalmente intercambiamos los números de celular e Instagram con la excusa de seguir en contacto, ya que de lo contrario no íbamos a coincidir más.
Pasó un tiempo y quería hablarle, pero no encontraba un motivo o excusa alguna. Sin embargo, ella un día respondió una de mis historias, algo totalmente inesperado para mí, pero aproveché para averiguar cómo estaba después de tanto tiempo y comenzamos a charlar. Para hacer esa conversación más cómoda le escribí al whatsapp y continuamos. Al final le dije que nos debíamos una juntada para ponernos al día.
Pasaron muchas semanas para poder coincidir, pero finalmente nos juntamos una tarde en un parque. La juntada fue excelente, estuvimos más de 2 horas hablando y nos reímos mucho. De cierta manera reforzamos el vínculo y ya nos podíamos considerar como nuevos amigos.
Pasaron los meses, hablábamos ocasionalmente y nos juntamos un par de veces más. Llegó el verano del 2024, ella sabía que yo tenía pileta y me decía que si estuviese en mi ciudad vendría a casa a refrescarse. Ella vivía en otra localidad a menos de 3 horas, pero estudiaba en mi ciudad, por eso no nos juntamos en esa época.
A fines de febrero se fue de viaje a Brasil con su familia, y por medio de sus redes pude comprobar lo que quería. Y es que sin dudas tenía un cuerpazo. Aunque eran fotos normales ya que no subía nada provocador.
Para que puedan imaginarla. “L” tenía 22 años en ese momento, mide 1,65 (que es bastante para una mujer en Latinoamérica), de pelo castaño, una cara angelical y de voz muy tierna. Era bien flaca, pero con unas piernas increíbles y un culo que sobresalía con cualquier pantalón que usara. Como buen amante de los culos que soy, no quería perder la oportunidad de ver eso con una buena bombacha.
Finalmente, en marzo volvió a la ciudad para seguir estudiando. Traté de buscar el mejor día para invitarla a mi pileta antes que acabara el verano. Lamentablemente el tiempo no acompaño y el día que vino a casa el viento hizo bajar la temperatura antes que pudiera meterse. Lamentablemente fue el último día lindo del verano. Por suerte, pude verla usando una calza tipo short, que copiaba la forma de su culo perfectamente y hasta pude distinguir su bombacha, que sin dudas parecía ser bien ajustada.
Durante esa charla, le conté que yo seguía yendo al gimnasio sin importar que era verano. Eso de algún modo la motivó a querer empezar gimnasio ese año. Lo que yo no podía creer era como tenía semejantes piernas sin entrenar. Pues “L” me contó que durante mucho tiempo practicó gimnasia artística y por eso tenía las piernas tan desarrolladas.
Pasaron los meses, seguimos juntándonos y nuestra confianza era cada vez mayor. A mitad de año era mi cumpleaños y ella no pudo visitarme porque rendía un examen. Sin embargo, me invitó a su departamento unos días después para tomar algo y así poder vernos. Bebimos bastante y de a poco la charla se puso picante. Hasta ese entonces, yo sabía que ella no tenía novio ni pretendía tenerlo en ese momento, ya que disfrutaba la vida de estudiante saliendo a bailar. Además, nunca entro en detalle si tenía mucho sexo o no, yo creo que en parte no quería aparentar que era una chica fácil. Como sea, de forma inesperada y con la vergüenza desaparecida por culpa del alcohol me pregunta:
“Si no tienes novia como decís, entonces te debes masturbar un montón jaja”
“Y bueno... todos nos masturbamos o no?” respondo.
Cuando pensaba que ahí iba parar, pues no, la cosa escaló:
“Que páginas miras, o que porno te gusta más”
Si bien entendía que nuestra confianza era bastante grande no pensaba que llegaría a tanto, aun así, decidí seguir el juego.
“Actualmente no miro tanto porno, más bien estoy en esas páginas de modelos webcams, que muestran el cuerpo, se siente más real y cercano que el porno.”
L: “¿He escuchado sobre esas páginas, es la nueva moda no? Es como tener OF, mueven un poco el culo y hacen buena plata, ¿verdad?”
“Algo así. Hay de todo, yo creo que si pones tu culo frente a una cámara haces una montaña de plata jaja”.
Ella se río de mi comentario, pero de alguna forma aproveché para tirarle el palo. Y aun así continué
“Y tú qué? ¿Miras mucho porno?”
“Epa, estás atrevido jaja”
“Bueno, empezaste esto y yo sigo”
Con una sonrisa algo traviesa, se toma un momento y dice: “Si, cada tanto miro. Me gusta colarme los dedos de vez en cuando jaja, pero ya está no pidas más información. Con mis amigas hemos hablado de quien se animaría a hacer un OF o algo parecido para hacer plata mientras estudiamos. Y yo creo que ahora que voy al gym tengo el cuerpo para conseguirlo”.
“Y no te daría vergüenza saber que hay gente de cualquier lado mirándote?”
“Obvio es algo en lo que siempre pienso. Pero mira, si hago esto siento que puedo animarme a algo más en un futuro”.
Automáticamente se levanta y da un giro para mostrarme su culo y moverlo un poco. Yo le respondo: “Woww, no lo quiero ver un 1 segundo más que se me va a caer la baba jaja”
L: “Jajaja estás terrible hoy, pero gracias por el halago”
“Es la verdad, además personalmente me gustan mucho los culos. Veo que el gym está dando sus frutos”
“Reconozco que soy culona, y me siento muy bien con eso. Así que gracias por tu sinceridad.”
Pueden pensar que fue una charla sin mucho sentido, pero va a ser importante para la trama.
Finalmente llegó el verano de este año (2025), ella decidió quedarse en su departamento y no volver a sus pagos. Sin dudas era una oportunidad única para poner invitarla a la pileta cuantas veces pueda.
Así empieza el mejor año de mi vida. Es mitad de enero, la invito a casa y ella me responde: “Por fin amigo, con este calor estaba esperando que me invitaras jaja”.
Comentarios
COMENTAR
¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales