Mujeres en mi vida 4

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Tía de Kike: La llamo así porque de verdad, no recuerdo su nombre. Era la tía de un niño de mi vecindad. Y sé que era gemela... y que la gemela sí era bonita, pero la "tía" no tanto. La tía de Kike era una mujer más tirando hacia "poco" atractiva. La recuerdo alta, bastante delgada y de facciones no tan agradables, pero tampoco era fea. En ese tiempo yo tenía un par de meses de no tener sexo con mujeres y me tenía que satisfacer pajeándome, así que cuando vi la oportunidad, la aproveché. Con ella quedamos ir a tomar un café y de regreso a su casa me invitó a pasar... y por supuesto estando en el sillón empezamos a besarnos y yo a meterle mano. Recuerdo que su cuerpo era bastante delgado y sus pechos pequeños pero firmes. De tez blanca y sin maquillaje. Los besos fueron creciendo y pronto yo la estaba desnudando. Le mamé los pechos y mordí los pezones y cuando le quité el vestido vi un cuerpo agradable, y con el tiempo que llevaba sin coger no puse ningún pero. Al bajarle los calzones tenía la panocha rasurada... pero ya le empezaban a salir pelos negros... esos puntos grandes y negros en la piel... y cuando le chupé la panocha me raspó mucho la cara, a tal punto que era un poco incómodo para mí... pero a ella le fascinó. Me dijo que prácticamente nunca le mamaron el coño y menos hasta que ella terminó... que no había tenido más hombres que su exmarido y que a él no le gustaba hacer más que meterle la verga y venirse rápido... y que ella tenía que satisfacerse con pajas diarias. Resultó que era una mujer muy caliente y no sólo necesitada de sexo, sino que le gustaba mucho. Y por supuesto que esa vez yo la mamé varias veces más y se volvía loca terminando con mi boca y sintiendo mis dedos dentro de su coño y de su culo. Y cuando le metí la verga le encantó y más por el tiempo que tardo en venirme... siempre termino hasta después que la mujer ha tenido por lo menos un orgasmo con mi verga adentro. Conmigo probó el sexo anal y por primera vez mamó una verga y sintió el semen en su boca. Cogimos casi todos los días las siguientes tres semanas... pero... empezó a querer una relación seria y formal conmigo... y yo, ni la amaba ni quería esa relación... le dije que era sólo sexo y amistad, pero ella quería más y decidimos terminar. Lástima porque sí cogía rico.

Lupita (2): La segunda Lupita que me cogí fue a otra mujer mayor que yo. 12 años mayor. Deliciosa. De tetas enormes y con los pezones muy grandes y casi negros y que se le ponían durísimos. La panocha muy peluda. Pelos negros. Y también culo muy peludo. Me fascinaba. Era casada pero separada del marido. Y también estaba buscando sexo y amistad, lo mismo que yo quería. Así que desde el primer día que nos conocimos (en una reunión de amigos) nos fuimos a meter al motel. Y la cogida fue sensacional. Desinhibida. Caliente. Experimentada. Llena de fantasías y fetiches. Lluvias doradas. Mamadas hasta terminar. Sexo anal. Dildos, pepinos y zanahorias. Ver porno y contarnos nuestras experiencias. Ella había cogido con otros 5 hombres y tenía, aparte de mí, a otro amante... y me contaba con todos los detalles qué hacían. Así estuvimos unos dos meses... pero a ella le diagnosticaron cáncer de mama y con el tratamiento que recibió y que su marido regresó con ella, paramos la relación. Al final la operaron y le quitaron un pecho... eso la dejó muy mal y me pidió que termináramos definitivamente. Hemos seguido siendo amigos y teniendo contacto. Logró vencer el cáncer, pero su forma de ser cambió radicalmente y yo respeto mucho cómo es ahora.

Marina: La vi en un almacén y ella era la dependiente. Por el morbo de verla de cerca entré a preguntar sobre los productos, aunque no tenía intención de comprar nada. Pero mi "radar" enseguida se dio cuenta de las señales y supo que podría invitarla a "salir". Era morena clara, bonita sin ser bella. Buen cuerpo y tetas medianas pero firmes. Usaba pantalones y no pude verle las piernas, pero después sabría por qué los usaba. Después de hablar un rato la invité a salir y aceptó, y cuando la recogí en su casa, sin preguntarle nada fuimos al motel. Ella con su silencio aceptó. Y en el cuarto al desnudarla, vi sus tetas medianas con pezones también medianos y cafés, ya parados. Y cuando le bajé el pantalón vi sus piernas... no se las rasuraba y eso me encantó y se lo dije y ella sonrió. Tampoco se rasuraba las axilas y me dediqué a oler y a chupar sus pelos... y cuanto más sudaba ella, más me excitaba. En el coño tenía un buen matorral de pelos negros y había que abrirlos para poder ver sus labios vaginales, que eran muy morenos y grandes y tenía un clítoris que salía y era delicioso de chupar. Me la cogí muy rico... y al terminar me empezó a contar sus "historias tristes" y que necesitaba dinero... y yo le dije que nunca le he dado dinero a una mujer ni mantenido una amante... y ella al ver que no obtendría nada de mí me dijo que era la primera y la última vez que saldríamos. A mí no me importó y la llevé directo a su casa. Una sola vez me la cogí, pero fue tan rica y sus piernas peludas me gustaron tanto que no la he olvidado.

Luz Gloria: Era una mujer de edad mediana. Casada. Colombiana. Morena, pero con el pelo rubio pintado. Coño rasurado. Cuerpo menudo, pechos que parecían pelotas de soft ball. Piernas delgadas y muy pocas nalgas. Nada excepcional, pero sí tenía mucha experiencia y cogía rico, por la panocha y por el culo... y mamaba la verga muy bien. Pero la razón por la que no la olvido es que ella y su marido eran swingers, los primeros que conocí. Y me invitaron a hacer tríos con ellos, que fueron deliciosos. Además, ella salía a coger conmigo o me invitaba a tríos con otros hombres que eran sus amigos pero que yo no conocía... y por supuesto que yo iba y fueron tríos excelentes. Además, su marido era muy bi y con él pasamos momentos deliciosos, en trío con Luz Gloria o sólo él y yo. Incluso se los presenté a mi amigo Leonel y él también gozó de ellos dos... y por supuesto que hicimos cuartetos... su marido, Leonel y yo contra ella. Y para Luz Gloria fue la primera vez que tuvo tres hombres sólo para ella... además que como los tres somos bi, era delicioso tener varias vergas también dispuestas para nosotros. Amábamos tomarnos fotos y todavía guardo esa colección y la vemos con mi esposa y tenemos sexo delicioso mientras yo le cuento todo lo que hicimos con ellos... y ella desearía haber estado también allí. Al final los trasladaron a otro país.

Continuará…


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