AMIGOS 6 INICIA UN LARGO ADIOS

-No pienses mi ángel, regálame estos días solo no pienses, vámonos linda- Me dice de manera dulce

El teléfono suena, veo la pantalla y me paraliza el alma es Pato y se me revuelve el estómago.

1 LLAMADA PERDIDA

Me quedo fría muy quieta Manolo me abraza siento la realidad salir de golpe del cajón quiero llorar de la angustia.

-Mi ángel regresa la llamada, sino va a sonar el teléfono todo el puto día ya sabes cómo es- Me dice tranquilo y me suelta.

Respiro hondo y presiono el botón de marcado, suena una vez y siento un hueco en el estómago, suena de nuevo, ruego porque no responda, no me quiero enfrentar a su voz, pero Dios no me escucha, su voz nace del otro lado.

-Adri corazón hermoso, pensé que seguías en la cama por la fiesta de ayer- Dice con esa voz grave y varonil que tiene.

- Hola Tito como estas? - Digo nerviosa

-Todo bien, solo que mmmm estaré un día más acá y lo de mi mama se va a atrasar entonces llego el martes, pero te juro máximo el martes en la noche estoy de regreso, te extraño, ¿pero dime que tal la celebración? - Dice casi sin respirar

Se me hace un nudo en la garganta y una culpa enorme presiona mi corazón.

- Todo salió … bien, si creo bien- las imágenes de la fiesta y la madrugada, de mi anillo, todo pasa por mi mente

- ¿Qué pasa, Adri te escucho rara al hablar, todo bien? - pregunta seco

Mis rodillas tiemblan y siento las manos frías, de pronto siento a Manolo detrás de mí, me quita el celular de la mano y comienza a hablar.

- ¿Hola Patricio como estas?; cómo va el proyecto, calma todo está bien la niña que tomo un poco de tequila cervezas anoche y está en ayunas aun y no se concentra ahora vamos con los vivos a Coyoacán para curarla…. perfecto Pato no te apures, todo estará bien…. ¡No!, aun no me regresare a Chicago, surgió algo por acá y me quedare unos días… no, es un asunto que tenía pendiente desde hace mucho tiempo y se tiene que terminar en estos días para seguir con los que sigue…. Esta perfecto, cuídate te paso a la niña, un abrazo- Me da el teléfono con toda naturalidad no se si no tiene culpa o no le importa

- ¿Hola? - Digo nerviosa

- Adri que bueno que todo esté bien, debes medir lo del alcohol por favor, debes estar feliz que Manolo se quede unos días más en México ya ves que luego sale disparado a trabajar… me tengo que ir amor, amor, amor… Se corta la llamada antes de que yo le diga algo

Cuelgo la llamada y veo fijamente el teléfono mientras se va a oscuros.

-Soy un ser humano despreciable y tu un sínico de los huevos sin vergüenza- le digo mientras lo abrazo y cierro los ojos para guardar las lagrimas

- Pero que querías mi ángel?; no le iba a decir a Pato que me tire a su prometida anoche y esta mañana y peor que le hare el amor hoy toda la tarde y asi hasta que exorcice un ángel del cuerpo de ti prometida - Me dice mientras me pone boca abajo frente a la cabecera de la cama que es un largo espejo

Acaricia mis costados sobre el vestido y me hace estremecer

-Quiero un cigarro Manolo- le digo mientras cierro los ojos porque la cabeza me da vueltas

Se levanta y va a la cómoda saca uno y lo enciende camina hasta mí, me acomoda en la cama mientras fuma, medio cuerpo está en la cama inclinada con los brazos sobre el edredón, se coloca detrás mío pegando sus caderas a mi trasero su pene erecto está rozando mi vestido, pone el cigarro en mis labios y me apresuro a inhalar.

-Cuando carajos dejaras de fumar? - me dice mientras levanta mi vestido dejando ver mi ropa interior.

-Cuando tu necesites que deje de fumar- Le digo como siempre

Sus manos se deslizan por mis muslos, se levanta para ponerme un poco más arriba en la cama, me toma las caderas y jala con cuidado mi ropa interior, ¡no dejes de fumar!, me ordena, ¡y mírate por el espejo todo el tiempo!; quiero que veas lo que yo veo cuando estoy dentro de ti.

Me eriza la piel cuando siento sus labios pegarse a mi cadera y bajar lentamente por en medio de mis nalgas, me saca un gemido cuando su lengua juega hasta acercarse a mi vagina que ya está húmeda y palpitante, sus dedos buscan mi interior, entra y sale intercalando su lengua abre mis muslos, literalmente mi sexo chorrea en su cara y se intensifican sus caricias, esta gozando con la reacción de mi cuerpo a sus caricias, mis piernas tiemblan las quiero cerrar de manera instintiva pero me lo impide.

- ¡Fuma! Y mira esa hermosa cara que Dios te dio, mira lo sublime que eres

Sus palabras me encienden de pronto pega sus labios y repite la operación, intento hacer lo que me dice, pero es muy difícil mi cuerpo se contrae todo se tensa y mi vientre arde y explota de pronto cada fibra de mi cuerpo me he venido en su cara, después de unos instantes lo veo sonriendo por el espejo, mi pecho agitado ya no puede más justo cuando toma mi muslo derecho y le da una tremenda mordida que me hace gritar.

- ¿Eso que demonios fue? - le digo sin aliento

- Solo un capricho mío, eres hermosa mi ángel- dice al levantarse y verme de frente.

- Vamos a almorzar mi vida, me voy a desmayar- le digo exhausta

Me besa tierno y nos levantamos, nuevamente hay un desastre en la habitación, entramos rápidamente a enjuagarnos y yo me pongo ropa interior limpia, alistados salimos del departamento busco las llaves del auto y el me las quita.

-No nos vamos a ir en coche, es sábado y será un infierno buscar lugar para estacionarlo, vámonos en taxi y en metro como cuando estábamos en la escuela, y te acompaña hasta la parada del autobús y luego yo regresaba a mi casa.

-Está bien si eso quieres vamos, pero ya porque muero de hambre – le digo colgándome de su cuello

Y yo me muero por ti mi ángel- Dice con voz dulce

Detiene un taxi subimos jugueteando, le da la dirección y nos olvidamos del chofer y el camino, me besa la comisura de los labios y sonríe como un tonto, le abrazo con fuerza y luego pongo mi cabeza en su hombro.

- ¿Pronto será? Dice el chofer sacándome del trance

- ¿Disculpe? - responde Manolo

- La boda, usted y su novia se ven muy enamorados, no se enoje joven pero ya es raro ver a personas con una actitud así, por lo general cada uno está metido en sus teléfonos y no se prestan atención, ¿cómo está el mundo que ahora el que se hablen o se muestren amor es raro no? - Dice el chofer

Mis mejillas arden de pena, siento un nudo en el estómago y veo a Manolo con temor.