De mis cosas favoritas en el sexo 2

Hay algo que me vuelve loco de placer. Ver a mi mujer gozando del sexo... con otros hombres. Y sí, también me gusta verla gozar con otras mujeres, pero me gusta más cuando otros hombres se la cogen. Y bien cogida. Que la hagan sudar, estremecerse, gritar, gemir de placer. Pero eso no lo logra cualquiera, por eso tenemos nuestros amigos preferidos y que ya la conocen tan bien, que saben perfectamente lo que le gusta a ella y lo que la hace gozar y revolcarse de gusto.

Por supuesto que le gusta conocer vergas nuevas, pero no todas le producen placer. Odia las muy gordas, enormes o muy largas... porque en lugar de placer le producen incomodidad o incluso dolor... y odia sentir que una verga no entra toda... porque hay que reconocer que los hombres de pijas enormes no la pueden meter hasta el fondo... y si les mide 12 pulgadas, en el mejor de los casos entraran unas 7 u 8... y el resto se queda afuera. Así que pijas de tamaño normal, medianas, de 6 o 7 pulgadas, le producen mucho placer. Incluso mi mujer tiene más placer con vergas cortas, delgadas o pequeñas, que con las enormes. Y sí, ya ha tenido bastantes vergas grandes como para confirmar su gusto. Hemos cogido con negros (algunos muy vergudos) y aunque las experiencias han sido buenas, ella no ha quedado satisfecha con el tamaño enorme de sus vergas... y menos porque definitivamente no se las han podido meter por el culo... o ella mamarlas como le gusta... se frustra cuando una verga no le entra más allá del glande en la boca. Y como no nos gusta nada de dolor, incomodidad o que sea tipo sadomasoquismo. Seguimos prefiriendo las vergas "normales", y como yo soy bi, también pienso lo mismo que mi mujer.

Me encanta ver cómo otros la miran, la desean, la desnudan con la mirada... y le van quitando poco a poco la ropa. Y cuando sus pechos quedan al aire, me fascina que se prendan a mamarlos y a llenarlos de saliva y a estrujar sus tetas... y le muerdan y le pellizquen (suave) los pezones, y ella empiece a gemir de placer. Y que le metan mano, que le soben las piernas, las nalgas... y que toquen su panocha peluda y le jalen los pelos... y también que le agarren las nalgas y se las aprieten y se las abran, y su ano café y peludo quede expuesto para que se lo mamen o huelan o le metan un dedo. Y por supuesto que me fascina ver a un hombre con la cara metida entre las piernas de mi mujer y mamando su panocha... y sé lo que él debe estar oliendo, degustando y sintiendo. Y que le mame y le muerda y le estire sus labios vaginales, que son oscuros y grandes... y se ponga a mamarle el clítoris y le meta la lengua lo más hondo que pueda... o que al mamarla le meta un par de dedos en la panocha o en el culo... y ver la verga de él moverse y seguro gotear precum... y me dan ganas de mamarla... y muchas veces lo hago; en lo que el amigo le chupa la panocha a mi mujer yo me meto bajo las piernas de los dos y le agarro la verga a él... y se la sobo y me lleno de su precum los dedos... y lo huelo y lo saboreo... y huelo su verga... y se la chupo... suave... despacio... porque no quiero que se venga en mi boca... cuando hacemos eso, prefiero mamar el semen que le metió en la vagina a mi mujer... y gozarme con el olor y el sabor de los jugos de los dos... y saber que es el semen de otro hombre... que mi mujer acaba de coger con otro hombre... que otro hombre estuvo metido en su panocha o en su culo, y que ahora yo me gozo con su semen. Y siento el olor del sudor del otro en la piel de mi esposa. Y sé que es prueba de que mi esposa desnuda estuvo con otro hombre... y que el olor de la piel del otro está mezclada con el de mi mujer. Y lo mismo me gusta hacer cuando el otro se la coge por el culo... se lo mamo para sacar el semen que le metieron... y le mamo la verga al otro... y siento el sabor de su semen y el de la vagina de mi mujer... y me encanta saber y pensar que esa verga, que no es la mía, estuvo dentro del coño de mi esposa... que otro hombre se saboreó a mi mujer... y en mi presencia y con mi total aprobación.

Amo sentir, tocar, acariciar, oler, chupar todo el cuerpo de mi mujer después que se la ha cogido otro. Sentir su piel pegajosa a su sudor y al del otro. El olor de ambos en el cuerpo de mi esposa... y en especial en su panocha. O el olor y el sabor de la saliva del otro, en la boca de mi mujer después que se han besado apasionadamente... y que yo he visto todo lo que hicieron. O sentir el olor y el sabor de la saliva del otro en los pechos y pezones de mi mujer... es un olor delicioso... sudor... saliva... sexo. Y besar a mi mujer y sentir el olor y el sabor de la verga del otro y saber a ciencia cierta que mi esposa acaba de tener una verga entre la boca... y que no fue la mía... que fue la pija de otro hombre... y sentir el sabor del precum que ella ya se saboreó... o del semen que le llenó la boca y que todavía deja ese olor y sabor tan característico del semen.

Me encanta ver a mi mujer con las piernas completamente abiertas y separadas... y ver su panocha abierta y todavía muy brillante de sus jugos... y ver los hilos de semen blanco salir de sus labios vaginales y dirigirse a su ano... y meter mis dedos entre su vagina y todavía sentir lo caliente y lo líquido del semen... y sacar con mis dedos todo lo que pueda... y oler y lamer mis dedos... y jugar con el semen que cae hacia su ano... y después oler y chupar la panocha de mi mujer y su culo, mientras le agarro las tetas y los pezones y se los estrujo... y le mamo el clítoris para que tenga otro orgasmo y restriegue su panocha contra mi cara, mientras se viene... y que el nuevo orgasmo mezcle mi saliva con sus jugos y con el semen que le acaba de meter el otro.

Pero mi mujer no todo el tiempo es pasiva. También me encanta ver cómo ella toma la batuta y se coge a otros hombres. Que es ella la que les hace todo lo que ella quiere... mamarlos, olerlos, meterles el dedo entre el culo. Pajearlos. Chupar sus pezones, axilas y culos. Cabalgarlos y darse sentones en sus vergas.

Ya seguiré contando qué me gusta del sexo.