CORTO REALTOS DE MI VIDA: MI PRIMERA INFIDELIDAD PARTE 2.

Mi lengua daba vueltas alrededor de su polla dentro de mi boca, yo sentí náuseas y quise vomitar pero él dijo tranquila cierre los ojos y siga, cerré los ojos y me entregue al placer, le perdí el asco y me deje llevar, cada vez lo disfrutaba más, por ratos me ahogaba ugh ugh ugh ugh ugh ugh ugh, pero él me decía, despacio niña ponle más saliva y sigue chupándola, se la chupe tan rico que lo hice venirse, aquello fue tan delicioso, sentir esa leche tan espesa y caliente que me hizo venirme al momento, cuando quise sacar su polla de mi boca y escupir su leche, él me tomó fuerte de mi cabeza y dijo trágalo, yo no quería tragarlo pero por más que quise quitarle las manos de mi cabeza no pude y me trague toda su leche, cuando saco su polla de mi boca parte de su leche se corrió por mi  boca, me tomo de las manos, me levanto del sillón y me dio un beso largo y profundo, el puerco metió su lengua en mi boca con su leche escurriendo por ella, aquel tipo no sentía ascos de nada, me cargó y me llevó a su cuarto, me dejo en la cama y me dijo, este día no lo vas a olvidar nunca, de un ropero viejo con olor a naftalina sacó un frasco con un líquido oscuro, se lo puso en las manos y se embadurnó la polla con eso, me puso un poco en mi vagina, esa cosa era como fría y caliente al mismo tiempo, al principio me ardía mucho, yo estaba boca arriba él puso mis piernas en sus hombros, empezó a lamerme los dedos de los pies, metía su lengua entre ellos, ahhhhhh era excitante, nunca había sentido nada igual, metió su enorme polla en mi vagina, su polla no era muy larga pero si era gruesa, las venas de su polla estaban a reventar, podía ver como entraba y salía de mí, yo pujaba de placer, ah ah ah aha aha más más más, más fuerte más más por favor métala fuerte si si si así así que rico hay hay hay más mas, aquello enorme topaba adentro de mi vagina con fuerza, lo hacía tan rápido que me hizo venirme muchas veces, ese día aquel hombrecito me hizo venirme más veces que todos los años haciéndolo con mi marido, llegó un momento en el que sentí algo caliente en mi vagina, como si fuera a orinarme encima y le dije tengo que ir al baño, pero él no atendió y siguió y siguió y siguió hasta que ya no pude más y solté aquello como una fuente, el sacó su polla de mi vagina y lo bañé con aquella orina, cuando él vio aquello metió su cabeza entre mis piernas y su cara quedó empapada, pero él estaba como loco y me chupó la vagina como un poseído, lamia y lamia chupaba mi clítoris metía toda su lengua y eso hacía que yo sacara más liquido de mi  vagina, después de un rato empecé a temblar sin control, eran como calosfríos, creí que era algo malo y me dio mucho miedo, nunca había sentido algo así, él me dio la vuelta y metió su cara entre mis nalgas y siguió lamiéndome, después metió su polla otra vez por mi vagina, yo estaba boca abajo, sin fuerzas, ya no quería más, estaba exhausta, temblando como una hoja, pero aquel hombre no estaba satisfecho y siguió dándome con todo, me lo hacía de diferentes formas, me ponía en posiciones que yo nunca habría descubierto con mi esposo, después de aquello perdí el sentido, cuando desperté, estaba tirada en la cama desnuda mojada y adolorida, me puse de pie con dificultad, ni siquiera sabía dónde había quedado mi camisón y mis sandalias, mucho menos mi ropa interior, cuando salí del cuarto no había nadie, la sorpresa que me di fue al ver en la pared el reloj, ya pasaba del medio día, como pude salí de aquella casa, tuve cuidado que nadie me viera, entre a mi casa como de rayo, me metí a bañar, después me cambie de ropa y fui por mi hijo al kínder que estaba a una cuadras de la casa, cuando llegué estaba la maestra de Migue con él en la puerta, yo me asusté al verlos, la maestra me miró y me dijo: Señora le recomiendo que la próxima vez que usted considere no llegar a tiempo mande otra persona por el niño, me disculpé con la maestra y le dije que no volvería a pasar, de regreso a casa pasé a comprar algunas cosas para cocinar, cuando llegamos a casa, Don Ronald estaba parado tocando el timbre de mi casa, yo no sabía que decir, el me vio y muy tranquilo me dijo, traje algo para que almorcemos, yo le hice señas por mi hijo, y el asintió, le dije, Don Ronald no se hubiera molestado, pero gracias, tome las bolsas de comida china, entre a la casa y cerré la puerta, él se quedó afuera esperando que yo le dejara entrar pero ya no volví a salir jajajaja, después de un rato se metió a su casa y ya no salió, por la tarde mi esposo regresó del trabajo y yo como buena ama de casa le dije, mira lo que mamá me pasó dejando !!! el me miró y dijo, a mi suegra como la quiero, voy a tomar un baño y comemos, ok le dije, ese día después de cenar y después de acostar a Migue en su cama, entre a mi cuarto y me metí a la cama, mi esposo estaba viendo la TV, al principio me sentí culpable, hasta me dieron ganas de confesarle todo, pero en ese momento él apagó la TV y dijo buenas noches, se dio vuelta y se quedó bien dormido, para mí eso fue una señal de que no había por que sentirse mal, ese día dormí como nunca, hasta soñé con Don Ronald jajaja. CONTINUARA ......