MÁS ALLÁDE LO SUPERFICIAL
Entre los artículos que republicó Bruno Bettelheim para su personal forma de autobiografía, figura uno que habla de la fisonomía de la casa, consulta y estudio de su maestro, Sigmund Freud, en Viena.
Bettelheim presenta en dicho artículo* una relación entre la morada, los objetos artísticos de Freud y su teoría psicoanalítica. Esto le sirve de hilo conductor para exponer la esencia del método psicoanalítico freudiano: bajo la superficie trivial, ordinaria y banal, bajo lo aparentemente intranscendente e insignificante, es donde subyace el secreto conflicto emocional oculto de los individuos. No es la forma sino el contenido en lo que la espeleología terapéutica ha de encontrar las claves para descubrir los desarreglos psicológicos de las personas. Es decir, la clave reside en el inconsciente de la mente humana. Para Freud y su escuela, los elementos constitutivos de lo inconsciente suelen presentarse en el estudio analítico de la psique bajo una compleja apariencia simbólica, que es menester desentrañar como vía para la solución del conflicto emocional de los pacientes, sus actos reprimidos y sus complejos en las relaciones con los demás. Sólo penetrando en los "enterramientos" emocionales de los sujetos se puede tener éxito en el remedio para sus padecimientos y la consecución de la vida placentera. O dicho con las palabras de Bettelheim, Freud logró encontrar un camino para desenterrar y liberar al sujeto "de la represión y la ansiedad" y con ello se abre la posibilidad para lograr el autoconocimiento y la liberación que "nos hace dueños de nosotros mismos ".
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*Sigmund Freud's Home and Offices. 1976
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