Denunciar relato
    				    
    				    	    						
    					
    				
                    			
			
		Los rusos tienen toda la razón.
Los homosexuales son muy malos.
¡Todos!
En mi pueblo se cuenta que una vez hubo uno (ése ya murió y, por supuesto, no dejaron que volviera a nacer otro...) que, en las noches de luna llena, salía a pasear entre los naranjos ¡sin comprobar si iba pisando o no a las pobres hormiguitas!
Es que sólo de pensarlo me entra una congoja...
(¡POR LA IGUALDAD Y LA DIFERENCIA!)
Comentarios
COMENTAR









¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales