Sábado noche

Por
Enviado el , clasificado en Adultos / eróticos
12217 visitas

Marcar como relato favorito

Por fin en casa! La verdad es que estoy cansada y con frío. Estos zapatos de tacón me estaban matando y ya no hace como para llevar el vestido rosa, es demasiado corto y estamos en septiembre. Aun así me lo he pasado genial. Creo que debemos juntarnos más las amigas para salir, desde que casi todas tienen novio apenas lo hacemos. Cinco chicas juntas hacen que todos los tíos se acerquen, a veces hasta cansa. Aunque el rubito del ultimo bar... no me hubiese importado que me cansara mmmm. Solo pensando en el ya se me ha quitado el frío.

Me quito los zapatos y el vestido. Iba a ponerme el pijama pero creo que hoy dormiré sin el. Me quito el sujetador y me meto en la cama. Que calorcito bajo las sabanas, que bien se está. No se como me viene de nuevo a la mente el rubito. Le tenia que haber dicho algo y me resultó hasta raro que el no me dijera nada. Eso si mirarme el escote bien que me le miraba, sin disimular. Por eso me gusta el vestido rosa porque es todo escote y me queda de vicio. Se me hubiese notado menos la costura con tanga, pero me gusta el culotte

Así sin darme cuenta mi mano se ha ido a mi culotte introduciendo mi mano por dentro de el para tocarme sin prisa mus partes mas intimas. Decidí, hoy me masturbaría pensando en el rubito....

Porque yo le pille mirándome las tetas pero seguro que el también me tuvo que ver cuando le miré la entrepierna... seguro que si, pues no pude evitar morderme el labio al ver tal bulto marcándose en los vaqueros...

Mi mano con estos pensamientos ya esta acariciando mi sexo. Hacia ya tiempo que no estaba tan cachonda y de tan empapada me entraban tres dedos con facilidad... me estaba excitando cada vez mas y a punto estuve de empezar a gemir. Tuve que contenerme sabiendo que mi hermana dormía justo en la habitación de al lado.

Así en silencio, metiéndome los dedos, frotándome el clítoris y acariciándome las tetas no podía sino pensar en el rubito follándome, taladrándome con su enorme poya sin parar, mirándome las tetas como en aquel bar.

Ya no puedo parar, frotándome mas rápido consigo correrme empapando el culotte aun más. Mmm ahora ya, relajada, seguro que duermo del tirón.

Antes de dormirme me paro a pensar y me doy cuenta que ya es la tercera vez que me masturbo hoy. Rubito o moreno, necesito una polla ya!


¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales

Denunciar relato

Comentarios

COMENTAR

(No se hará publico)
Seguridad:
Indica el resultado correcto

Por favor, se respetuoso con tus comentarios, no insultes ni agravies.

Buscador

ElevoPress - Servicio de mantenimiento WordPress Zapatos para bebés, niños y niñas con grandes descuentos

Síguenos en:

Facebook Twitter RSS feed