La muerte, mi eterna compañia (Con: Mal Trago)

Por
Enviado el , clasificado en Poesía
1394 visitas

Marcar como relato favorito

Solo en mi carro, con un poco de música deprimente,

Apago la radio, fumo de lo poco de mi cigarro,

Tomo un trago de ese amargo elixir claro,

Recuerdo de donde vengo y a donde es que voy,

Me aferre al volante y la euforia desbordó,

Sentía ganas de morir, y mi mente no me dejaba de repetir,

-Acelera ese viejo automotor, tomando tal vez la mejor decisión

Llegaba ya a los 100 k/h, seguía acelerando ese gastado motor,

Quería acabar con mi vida, no había ya otra elección,

Recordé todos los momentos, malos o buenos, todos fueron gratos recuerdos,

Que me hacían pisar mas el acelerador, que me hacían llorar y beber,

Fumar y mi pie de su forzado lugar no querer ya levantar,

Recordando todo lo que soy, a lo que vine y por que me voy,

Iba ya cegado de emoción, mi botella se derramó y mi cigarrillo me quemó.

Fue en ese momento cuando mi mirada se soltó, 

Mientras poco a poco soltaba el ya entumido acelerador,

Estaba mi muerte a lado, mirando directamente en mi interior,

Llorando y sin temor con voz cortada comenté,

Preciada amiga mía, eres mi eterna compañía.

¿Es ya el momento de cerrar los ojos y dejar de vivir esta triste travesía?

Con una sonrisa forzada, y una voz retumbante,

Me dijo al oído mientras desvanecía susurrante.

Hay amigo mío, te sientes mas que perdido,

Vas mal y mal es algo corto a lo lejos que tu has ido,

Pero ten fe en tu camino pues es de tu elección,

Y aun que vallas de la verga, tu camino es el mejor...


¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales

Denunciar relato

Comentarios

COMENTAR

(No se hará publico)
Seguridad:
Indica el resultado correcto

Por favor, se respetuoso con tus comentarios, no insultes ni agravies.

Buscador

ElevoPress - Servicio de mantenimiento WordPress Zapatos para bebés, niños y niñas con grandes descuentos

Síguenos en:

Facebook Twitter RSS feed